31/3/17

ENALTECIMIENTO DEL HUMORISMO

Propongo legislar el delito de enaltecimiento del humorismo. Ya está bien, carajo. Ley Orgánica de Regulación de la Ironía y la Chanza en la Vida Cotidiana. Alrededor de la condena que se ha cometido contra Cassandra Vera, algunos humoristas -Wyoming, Buenafuente- han incluido en sus intervenciones nuevas bromas sobre la exagerada muerte de Carrero Blanco. Pues a la cárcel con ellos por enaltecimiento del terrorismo. Y otros, como David Broncano, han realizado monólogos defendiendo la sátira sin miramientos puritanos. Pues a la cárcel también con él por enaltecimento del humorismo. Darío Adanti acaba de publicar un libro definitivo acerca del humor titulado “Disparen al humorista”. Exagera; nadie está defendiendo dispararle sino simplemente encarcelarle. El título de Adanti es una exageración humorística que… ¡un momento! ¿exageración humorística? Darío Adanti a la cárcel también para que aprenda de verdad cuáles son los límites del humor: los de los muros de Alcalá-Meco.

Así al menos podremos enchironar a los responsables de la condena que ha recibido Cassandra Vera por haber bromeado sobre el asesinato del siniestro fascista Luis Carrero Blanco a mediados del siglo pasado. Porque lo que ha ocurrido alrededor de este asunto es un puto gag de Monty Python, una secuencia de “Bananas” de Woody Allen, una performance de Leo Bassi. No sé en cuántos paquetes de 140 caracteres puede dividirse la sentencia del tribunal de la Audiencia Nacional, pero ésa sí que es una retahíla de tuits en donde se comete el delito de enaltecimiento del humorismo y humillación a sus víctimas. La larga agonía de Francisco Franco fue seguida con atención por la sociedad norteamericana; tanto que, cuando finalmente palmó la rata, Chevy Chase creó una frase recurrente en los falsos noticiarios del “Saturday Night Live”: “El Generalísimo Francisco Franco sigue muerto”. Apliquemos la Ley Orgánica de Regulación de la Ironía y la Chanza en la Vida Cotidiana a esos jueces. Al talego con ellos. O, al menos, que copien cuarenta y ocho millones de veces, una por cada español indignado por lo que han hecho, la frase de Chase.

30/3/17

ATRESMEDIA CONTRA ATRESMEDIA

La prueba irrefutable de que el Señor no me ha llamado por el camino empresarial es que soy totalmente incapaz de entender la estrategia comercial de Atresmedia estrenando a la vez dos programas estrella el mismo día a la misma hora en sus dos cadenas generalistas. Ocurrió el martes en el prime time. Antena 3 con “El árbol de tu vida”, laSexta con “Cazadores de trolls”. Como la amoxicilina, ambos son espacios de amplio espectro y compiten por un nicho común. Ya que “Cazadores de trolls” es un programa que puede dar un buen mordisco a la audiencia en su estreno, Antena 3 lo contraprograma con “El árbol de tu vida”. Je, je, muy hábil. Ya que “El árbol de tu vida” pretende convertirse en un programa de referencia esta temporada y obtener grandes resultados, laSexta lo contraprograma con “Cazadores de trolls”. Je, je, bien pensado. Todo muy lógico, muy atenido a las reglas de la libre competencia, si no fuera porque Antena 3 y laSexta tienen el mismo dueño. Atresmedia contra Atresmedia. Je, je, no entiendo nada.

El pastelón repipi, soporífero y toñimorénico que es “El árbol de tu vida” -no puedo juzgarlo con mucho criterio, sólo lo vi a medias porque anduve zapeando con “Cazadores de trolls”- obtuvo buenos resultados de audiencia, pero los hubiera obtenido mejores si Atresmedia hubiera dejado esa noche laSexta con una programación de perfil bajo. La crónica sensacionalista y sobreactuada de las nuevas andanzas del desfacedor de entuertos pedrogarcíaaguádicos que es “Cazadores de trolls” -lo digo con cierta prudencia, ya que sólo lo vi a medias al haber estado zapeando con “El árbol de tu vida”- tampoco funcionó mal; quizá lo único que le faltó para ser un gran éxito fue que su propia empresa no le pegara un tiro en el pie programando un gran estreno en Antena 3. Si los caminos del Señor son insondables, no les quiero contar cómo son los caminos de los grandes grupos empresariales, que son el único ente que se encuentra por encima de Dios en la jerarquía eclesial. Doctores tiene el Santo Padre Mercado para entender por qué resulta beneficioso competir contra uno mismo.

29/3/17

AUSCHWITZ Y LOS ORGASMOS

En la película “Barbarella”, el doctor Duran-Duran, un sabio loco que inventó una máquina que mata provocando orgasmos, dice a la Venus del espacio interpretada por Jane Fonda que le hará cosas (cosas malas, se entiende) que están más allá de toda filosofía. La amenaza de Duran-Duran tiene gracia, pero tiene menos gracia si, como me ocurrió a mí, se presenta sin avisar mientras vemos “El hijo de Saúl” (Movistar+), la aterradora película de László Nemes que muestra las tripas de Holocausto de una forma tan realista y precisa, sin regodearse en la pornografía del horror, que es imposible levantarse del sofá sin concluir que el malvado Duran-Duran no llega ni a los tacones de los médicos nazis con bata blanca que trabajaban en Auschwitz. Como dice la filósofa Susan Neiman, los nazis produjeron más mal, con menos maldad, de cuanto hasta entonces había conocido la civilización. El mal de Auschwitz en un mal rutinario, burocrático, industrial, humeante; un mal que no necesita malvados teatrales como Duran-Duran o como los malos que se enfrentan a James Bond. A pesar de lo que dice el sabio loco de “Barbarella”, la filosofía tiene armas para enfrentarse a Duran-Duran, pero está desarmada ante el horror industrial de los pasillos de las cámaras de gas de Auschwitz, el acarreo de cuerpos hasta los hornos crematorios y el traslado de las cenizas sobrantes al río.

El mal de “El hijo de Saúl”, y no el mal de una máquina que mata provocando orgasmos, está más allá de toda filosofía. El problema no es tanto el silencio de Dios ante el horror de Auschwitz, porque ya Baruch Spinoza dejó claro que Dios está libre de pasiones y no puede experimentar afecto alguno de alegría o tristeza, como el silencio de los hombres y el silencio de la filosofía. Estudiar a Platón, a santo Tomás de Aquino o a Kant en los institutos está muy bien, pero no debemos permitir que el mal de Auschwitz esté más allá de toda filosofía. Nuestros jóvenes deben reflexionar acerca de si es conforme al deber que el mercader no cobre más caro a un comprador inexperto, como pensaba Kant, pero también deben ver “El hijo de Saúl” en clase de filosofía y entender las diferencias entre una cámara de gas y una máquina que mata con orgasmos.

28/3/17

A TVE LE IMPORTAMOS UNA MIERDA


No queremos una tele pública cuyo fin sea que nos sintamos informados, queremos que se nos informe de forma cabal dentro de lo posible. Igual que no queremos unas fuerzas de seguridad públicas cuyo objetivo sea que nos sintamos protegidos, sino que nos proteja de forma cabal dentro de lo posible; ni queremos una DGT cuyo objetivo sea que nos sintamos bien dirigidos cuando circulamos, sino que dirija bien el tráfico de forma cabal dentro de lo posible. Cómo nos sintamos o no es algo demasiado escurridizo y, sobre todo, manipulable, como para servir para evaluar la realidad. No es nada personal, Protágoras, solo se trata de cerrar la puerta al capricho, la arbitrariedad y, sobre todo, la manipulación a las que tan fácilmente se prestan sentimientos y emociones.

Por ello no queremos una tele pública cuyo objetivo sea que no nos sintamos ofendidos, sino una tele que no esté pendiente de nuestras creencias, obsesiones o caprichos porque no son de su incumbencia. Una tele que no nos ofenda porque nos trate como a ciudadanos de una sociedad plural y equitativa: con justicia, esa señora de ojos vendados y una balanza en la mano. Una tele que nos trate igual, ni peor ni mejor, que a los demás.

La edición de “TVE responde” de este domingo en La 2 volvió sobre el Festival Drag de Las Palmas. Tras las quejas por emitir esas imágenes, TVE pidió disculpas porque “pueden resultar ofensivas, especialmente para las personas de culto católico”. Ya, pero ¿y los demás? Porque, qué diferencia, las quejas por retirar esa gala de la web de RTVE no recibieron ninguna disculpa. De hecho, TVE se reafirmó en su censura “dado que podía herir la sensibilidad de un amplio sector”. ¿La sensibilidad de unos sí y otros no? Lo peor es que TVE tiene la solución judicial al conflicto en sus manos, pero no quiso aplicarla. Así cerró la pieza: “Según la fiscalía de Las Palmas, que ha archivado una denuncia presentada contra la actuación, en la misma no se aprecia voluntad de ofender una religión sino una crítica ácida deslizada en un contexto de Carnaval”. Ah, la justicia, esa señora de ojos vendados o vendidos, y balanza o embudo, según los casos.

27/3/17

MARÍA TERESA CAMPOS SIN BIGOTE


Vaya si molaría. Imaginen que Bigote Arrocet, primer participante confirmado por Telecinco para la próxima edición de “Supervivientes”, se marchara a su destino en, por ejemplo, el Polo Norte, se quedara allí y no se acordara de él ni Dios hasta dentro de un año. Ni resumen semanal los lunes, ni conexiones en directo con el Polo Norte los martes, ni debates por las nominaciones los miércoles, ni galas con las expulsiones los jueves, ni pruebas de supervivencia construyendo un iglú los viernes, ni pruebas de inmunidad persiguiendo focas los viernes, ni intercambio con los “Supervivientes” de Brasil los domingos, ni más vueltas a la matraca todos los días en “Sálvame”. Quedaríamos sin Bigote y María Teresa Campos lampiña. Todo ventajas.

La idea viene de fuera. Es un caso más de bendita serendipia, uno de esos hallazgos felices a los que se llega inesperadamente cuando se trabaja en otra dirección. Ocurrió en el británico Channel 4. En esta loca carrera por darle otra vuelta de cuerda a los ‘reality shows’ diseñaron “Edén”, un “Gran hermano” en el que mantendrían en aislamiento en las Highlands escocesas para su seguimiento y vigilancia televisiva a una tropa de esos concursantes, habituales en este tipo de programas, que están dispuestos a soportar todo tipo de trabajos con tal de no trabajar. Irrelevante si no fuera porque “Edén” no tuvo audiencia, dejó de emitirse, no avisaron a los participantes y siguieron como si nada. Un año en el que aquellos aspirantes a ombligo del mundo se sentían el centro de atención cuando en realidad tenían el mismo seguimiento que tenemos la mayoría en las redes sociales mientras soñamos que alguien nos hace caso.

Y ahora imaginen que pasara lo mismo en nuestros ‘realities’, empezando por la inminente y amenazante emisión de “Supervivientes”. Además de Bigote, también se habla de Alba Carrillo, de la madre de Aída Nízar, de Belén Esteban, de un ‘asesor’ de “Cámbiame”, de un ‘tronista’ de “Mujeres y hombres y viceversa”. Imagínenselos a todos en las Highlands, en el Polo Norte, en el Polo Sur… Durante un añito estarían bien en cualquier parte.

26/3/17

EL TEKILA Y LA PREVERDAD


I. En Estados Unidos se sospecha que Rusia ha podido alterar de alguna manera el resultado de sus elecciones presidenciales. En España todo parece indicar que Forocoches intervino en la final de “Got talent”. Diferentes países, diferentes escándalos. En alguna realidad paralela Rusia altera el resultado de la final de “Got talent” y Forocoches interviene en la elección del presidente de los Estados Unidos. Eso sí, en dicho universo alternativo vuelve a obtenerse el mismo resultado -ganan Trump y el Tekila- pero al revés: Trump gana la final de “Got talent” mientras Hillary Clinton abandona indignada el plató, y el Tekila reúne los votos electorales necesarios para ocupar la Casa Blanca mientras baila rockabilly alrededor de Risto Mejide.

II. ¿Por qué lo llaman “postverdad”? El nombre adecuado es “preverdad”. Tomar como criterio de verdad a uno mismo antes que al mundo no es una elaboración a posteriori de la verdad moderna sino su interrupción a priori antes de estar terminada. No es su consecuente, sino su antecedente. La preverdad siempre ha existido como tentación, pero sólo tras un siglo de publicidad televisiva se convierte en un orgullo: “¿por qué el mundo no va a ser lo que a mí me dé la gana?” es el resumen de todos los eslóganes. El Tekila fue el mejor concursante de la historia de “Got talent” y Trump está siendo el mejor presidente de la historia de los EE.UU. ¿Por qué lo llaman “postmodernidad”? El nombre adecuado es “premodernidad”.

III. La Resistencia como movimiento político en la sombra es uno de los arquetipos más sólidos en las ficciones modernas. Está en “Star wars”, en “The walking dead”, en “Mr. Robot”, en “Los juegos del hambre”. Nos guste o no, no existe hoy en España un movimiento autogestionado, socialsindicalista, de masas y resbaladizo que pueda encarnar el espíritu de la Resistencia mejor que Forocoches. Es nuestro anonymous, nuestro V de Vendetta. Primero tomamos “Got talent”, después tomamos los telediarios. Cada país tiene el presidente, la Resistencia, y el ganador de “Got talent” que se merece.

25/3/17

¿SABE TERELU EL TAMAÑO DE LOS SOBAOS PASIEGOS DE SELAYA?

Claro, cómo no va a haber fracasado “Qué tiempo tan feliz” si no invitaban frecuentemente a Miguel Ángel Revilla. Por favor, María Teresa, eso es ignorar el primer mandamiento de la televisión en España: “Invitarás a Revilla sobre todas las cosas”. ¿En qué estabais pensando, Mediaset? Luego ya te podrás preocupar de que el programa sea ameno, tenga ritmo, interés o no dé vergüenza ajena. Pero primero, Revilla. Hasta en la sopa. Con cualquier excusa. Venga o no venga a cuento. Mira a José Mota, que no tiene un pelo de tonto. Estrena un nuevo programa ¿y a quién trae? A Revilla. ¿Tuvo algún interés la entrevista? Tanto como hurgarse un agujero de la nariz. ¿Y qué? O Revilla o nada. Mira a Bertín Osborne, también la semana pasada. ¿La casa de quién fue su casa? ¡La de Revilla! ¿Sacaron algún provecho los espectadores que siguieron la charla? El mismo que hubieran sacado hurgándose el otro agujero de la nariz. ¿Alguien se ha quejado? Revilla o muerte, venceremos. ¿Y Risto? ¿A quién sentó en el sofá ése hace pocos días? ¡¡A Revillaaa!! ¿Valió para algo? Para lo mismo que vale meterse dos dedos en los dos agujeros de la nariz y respirar dificultosamente por la boca. ¿Pasa algo? Revilla, luego existo. Lo saben en “La sexta noche”. Lo saben en “Espejo público”. Lo saben hasta Trancas y Barrancas. ¿No lo sabías tú, Terelu, hija?

Y ahora la ex-presentadora de "Qué tiempo tan feliz" está triste… ¿Qué esperabais, apoyándoos en Torito, Bigote Arrocet y los Supersingles? En nuestro país, hacer un programa de televisión y no invitar a Revilla es como bromear sobre Mahoma o sobre Carrero Blanco: muy arriesgado. Bien lo saben en “Got talent”, tras varios años intentando fichar de jurado a Revilla. “GH VIP” ofreció a Revilla una edición especial que se llamaría “GH ReVIPlla”. Las negociaciones de Revilla con “Tu cara me suena” se rompieron en el último momento y su lugar lo ocuparon Los Chunguitos. Así que espero, María Teresa, que al menos hayas aprendido la lección: “Las Campos” necesita urgentemente un cameo de Revilla. No me digas que no sabes cómo encajarlo. ¿Sabe Terelu el tamaño de los sobaos pasiegos de Selaya?

24/3/17

LA VIRGEN CON BURKA


Reivindico el derecho de Intereconomía a pitorrearse del islam, a parodiar sus costumbres, a reírse de sus tradiciones. Por supuesto, no solo ningún fundamentalista religioso debe enfadarse, tampoco ningún musulmán debe denunciarlos por ofensa a las creencias religiosas, ni pedir que clausuren la cadena, despidan a la subdirectora ni cierren el programa en el que dijo barbaridades disfrazada con un niqab y amagó un estriptis final. Beatriz Rojo solo ejerció la libertad de expresión que nos hemos dado en nuestra sociedad aconfesional en la que una creencia religiosa no tiene por qué merecer una protección superior a ninguna otra, incluidas las creencias racionales que, tras años de investigación y estudio, comparten los filólogos o los biotecnólogos.

Rojo presentó así su especial informativo: “Nos preguntaremos si en Occidente estamos condenados a ver a mujeres europeas sometidas al dictado del fundamentalismo islamista. […] Es un hecho probado que la integración de los musulmanes en nuestras sociedades es una utopía. No acatan nuestras leyes, no respetan nuestras normas de convivencia, tampoco nuestra cultura o nuestras tradiciones. […] ¿Por qué los gobiernos europeos miran para otro lado ante la amenaza creciente de la invasión islamista?”.

Cuando la fe se supedita cada vez más al gusto del cliente, hacen bien en Intereconomía al celebrar el carnaval en Cuaresma. ¿Una drag queen se disfrazó de Virgen y Cristo en el carnaval de Las Palmas? Pues alegría: Rojo se disfrazó con un niqab (y no un burka) para presentar el programa “Islamización en Europa, ¿llevaremos burka?”. Todo vale, tíos. ¿Es un desprecio a la mujer que no le preocupe que el fundamentalismo someta a las mujeres sino solo a las europeas? ¿Incita al odio decir que no algunos sino todos los musulmanes no se integran, no acatan las leyes ni respetan nuestra cultura o tradiciones? ¿Y que hable de “invasión”? No señores: el carnaval es el carnaval y mi amigo Moja Sainy estará muerto de risa aplaudiendo a esta drag queen tan loca, loca, loca.

23/3/17

PORNO EN TVE


Los reyes son casi como los actores porno. Antes eran iguales sin más, porque su trabajo estaba íntimamente unido a la sexualidad y la reproducción (lo que estrechó lazos entre Alfonso XIII, gran impulsor de la industria del porno española, y sus actores). El reciente desarrollo de métodos anticonceptivos y tecnologías de reproducción separó sexo y reproducción, y, de rebote, a reyes y actores porno. Por eso hoy podemos decir que de los actores porno interesa el sexo (algo público) y no la reproducción (algo privado), mientras que de los reyes interesa la reproducción (de interés público) y no el sexo (un asunto privado). Pero esta separación solo se da si los reyes permiten que un funcionario compruebe que usan anticonceptivos en sus encuentros sexuales. O si, menos engorroso, se someten a una vasectomía o ligadura de trompas vigilada por la Guardia Real. Así es la naturaleza de su antiguo y extraño trabajo. O lo toman, o lo dejan.

La incontinencia sexual de Felipe IV, que dejó decenas de hijos pero un solo heredero deforme, la consanguinidad que acabó con la Casa de Austria, la macrosomía genital de Fernando VII que al dificultar su vida sexual causó una crisis sucesoria y las Guerras Carlistas, el servicio de Isabel II a la corona rompiendo la endogamia borbónica con un capitán de ingenieros para traer al mundo a Alfonso XII o la importancia política de bastardos reales como Juan de Austria son algunos ejemplos de la importancia que la bragueta real siempre tuvo. De intimidad, nada. A ver por qué ahora iba a ser diferente.

Por eso es vergonzoso que TVE sea la única cadena que no habla de las grabaciones secretas hechas a Juan Carlos (el rey), incumpliendo su deber de informar y servir al soberano (el pueblo, según la Constitución). Eduardo Inda dice en “laSexta Noche” y en toda su gira televisiva que hay conversaciones íntimas que jamás se publicarán y que la vida privada del rey no es relevante, sino que hubiera pinchazos. ¿Íntimo? ¿Privado? Seamos monárquicos de verdad. Igual que es un deber la protección y manutención pública de los reyes, es un deber vigilarlos, no en secreto sino rutinariamente, porque nos va la monarquía en ello y debemos proteger la línea sucesoria de tan real linaje.

22/3/17

IÑAKI MUERDE A JORGE JAVIER


Noche del sábado. Prime time. Una cadena plantea un debate político acerca de la conveniencia de legislar la gestación subrogada con representantes de diversas posiciones ideológicas. Otra cadena está hablando mientras tanto de los encuentros sexuales entre un personaje muy conocido por sus aventuras amorosas y una de sus muchas amantes. En la primera cadena discuten políticos, periodistas y representantes de asociaciones de marcado cariz ideológico. En la segunda cadena todo parece girar alrededor de una estrella del periodismo basura que igual se dedica a cuestiones de política, de deportes o de amoríos. En la primera cadena se habla de feminismo, izquierda, justicia social. En la segunda cadena se habla de yates, pisos para encuentros furtivos e imágenes captadas sin el consentimiento de los protagonistas.

No voy a decir todavía cuál es cuál. Pero uno de los dos programas sobre los que estoy hablando es “La sexta noche”, la larguísima tertulia política de laSexta. Y el otro es “Sálvame Deluxe”, perdón, quise decir “Sábado Deluxe”, la última mutación del programa basura estrella de Telecinco. Uno lo presenta Iñaki López y Andrea Ropero. El otro lo presenta Jorge Javier Vázquez. Uno afirma ser un programa serio de debate mientras que el otro no tiene empacho en reconocer que no pasa de ser un espacio de entretenimiento frívolo y banal para gente sin especiales luces que no quiere pasarse la noche del sábado comiéndose la cabeza.

Y ahora, claro, llega la pregunta del millón: ¿qué cadena estaba emitiendo el debate sobre la gestación subrogada y cuál dedicaba su tiempo a hablar del folleteo de un aristócrata? Les daré una pista recordándoles ese sobadísimo dicho periodístico según el cual no es noticia que un perro muerda a un hombre, pero sí es noticia que un hombre muerda a un perro: es decir, que si hubiera sido Telecinco la cadena que estuvo hablando del corazón y laSexta la cadena que estuvo hablando de política, yo no hubiera escrito esta columna. ¿Saben ya cuál de las dos cadenas fue Telecinco y cuál de las dos cadenas fue laSexta en el horror de la noche del sábado?

21/3/17

EL XEFXIT


A ver, que yo no estoy asegurando que haya una relación directa, pero me llama la atención que ningún analista de política internacional haya relacionado el Brexit con “El xef”. Todos nos quedamos sorprendidos cuando el pasado junio se celebró el referéndum en el Reino Unido y ganaron los defensores de la ruptura con la Unión Europea. Nadie esperaba el resultado y en los medios de comunicación se discutieron explicaciones relacionadas con la idiosincrasia británica, sus problemas económicos o la geopolítica de los movimientos migratorios. Pero este fin de semana, con el estreno de la segunda temporada de “El xef” en Cuatro, nos enteramos de que aquellos meses D…a…b…i…z (perdonen, es que me cuesta mucho escribir “David” con "b" y "z", y me atasco varios segundos entre tecla y tecla) Muñoz se los pasó por el barrio de Mayfair abriendo su nuevo restaurante en Londres. ¿Coincidencia? Es posible. ¿Mera casualidad? Yo no digo que no. ¿Reacción de pánico justificado de la población inglesa al ver lo que se les venía encima desde la Europa continental? Pues tampoco creo que esta posibilidad sea descartable.

Quizá alguno de ustedes piense que exagero. Sherlock Holmes, otro londinense ilustre cuya serie también terminó para siempre coincidiendo con la llegada de.. (ufff… venga, ánimo) D…a…b…i…z Muñoz a la ciudad, deduciría que el que piense así no ha visto el estreno de “El xef”. Un cocinero que define su cocina como canalla, bestia y radical, que considera su propio ego como el producto más importante que ofrece su restaurante, que advierte a sus comensales que de que van a asistir a un crimen gastronómico, llega a un país, y a continuación el país se marcha del continente. Es cierto que “a continuación” no significa “a causa de”, pero lo sugiere. Pronto saldremos de dudas: el marido de Cristina Pedroche (no es una referencia sexista, sólo intento no tener que volver a escribir su nombre) ha declarado su intención de abrir otro de sus locales en Nueva York. Como EE.UU. comience a construir muros o a endurecer sus políticas inmigratorias, yo empezaría a pensar que lo que ocurrió en junio pasado entre el Brexit y el x...e...f fue algo más que una mera coincidencia.

20/3/17

TUTANKAMÓN NO ES LULÚ


Jean-Baptiste Botul, el filósofo ficticio creado por Fréderic Pagès y autor del exquisito ensayo “La vida sexual de Immanuel Kant”, apuntó con elegante audacia que las musas, ninfas y diosas desnudas de los frescos de La Sorbona salen directamente del salón de un burdel. El artista los rebautiza para la ocasión como Razón, Templanza, Justicia o Virtud, pero en su vida civil se llaman Mimí, Lulú, Kiki o Fernanda. ¿A que a partir ahora no verán de la misma manera los frescos que adornan las universidades? ¿Verdad que una alegoría de la Razón a la que también podríamos llamar Lulú pierde solemnidad pero, a cambio, gana encanto? Pues bien, el arte egipcio es diferente. Es imposible pensar en Lulú o en Kiki cuando contemplamos las hermosísimas pinturas de la tumba de Nefertari, y eso hace que las pinturas egipcias, a diferencia de los frescos de La Sorbona, pierdan encanto cuando entran en un museo pero, a cambio, ganan solemnidad. Algo parecido sucede con la famosísima tumba del faraón Tutankamón: gana encanto cuando protagoniza una miniserie como “Tutankamón” (#0), pero pierde solemnidad.

Porque el protagonista de “Tutankamón” es, precisamente, el encanto de Tutankamón, no la solemnidad del arqueólogo Howard Carter, del mecenas Lord Carnarvon, de su hija Evelyn o de los trabajadores egipcios que arrancaron con sus manos la tumba del faraón de la arena del Valle de los Reyes. El centro de “Tutankamón” es Tutankamón, el faraón más encantador para los aficionados al antiguo Egipto, aunque la serie tiene el acierto de acercarse al trabajo del arqueólogo para hacernos comprender que la egiptología tiene más que ver con el conocimiento y la paciencia que con las intuiciones de nuestro querido Indiana Jones. “Tutankamón” es una serie respetuosa con el encanto de Egipto y con la solemnidad de héroes de la egiptología como Carter, pero sobre todo tiene el encantador aroma del hallazgo arqueológico en los minutos de descuento del partido, cuando ya todo parecía perdido. Si quieren pasar un rato encantador en Egipto, vean “Tutankamón” o viajen al Valle de los Reyes y entren en la tumba del joven faraón. Si prefieren la solemnidad de los frescos de La Sorbona, visiten el Museo Egipcio de El Cairo y enfréntense a la máscara funeraria de oro de Tutankamón. Comprobarán que Tutankamón jamás podrá ser Lulú.

19/3/17

"CÁMBIAME", PERROS Y PERRERÍAS


Tardaba en llegar y llegó. Un “Cámbiame” con perros. Quiero decir, con dueños de perros. Bueno, un “Cámbiame” para que cambien los dueños de los perros cambiando también al perro. Cambian, ya saben, como cambian las cosas en “Cámbiame”: de mentira. Así los participantes aparentemente hacen algo con su vida sin tener que tomarse la molestia de hacerlo realmente. Para qué ocuparte de ti mismo si Telecinco te lo da hecho. Para qué preocuparte por nada si Mediaset te llena de aplausos. Y si es con perro, mejor. Lucirás más si también dan un repaso de chapa y pintura al perro.

Martha estaba harta de que su perro Donald la eclipsara acaparando todos los halagos. “Quiero que se me vea”. Dicho y hecho. Gomina, maquillaje y vestido para ella. Deslanado, baño y cepillado para él. Aplausos y que pase el siguiente. El perro es como un bolso, un cinturón o una diadema: un complemento. Si quieres cambiar, ya no solo te hacen mil perrerías a ti, pero también a tu perro. Aunque en “Cámbiame” deben tener en cuenta que hay limitaciones.

Si se trata de cambiar al amo para que esté guapo, se puede modificar todo lo que se quiera si se limita al cuerpo, al fenotipo, pero no se puede actuar sobre el genotipo. Está bien visto actuar sobre el peinado, el vello facial o el tabique nasal de los humanos, pero nada de selección artificial. ¿Quieres ese color de ojos?, pon lentillas y andando. Estilistas: albañilería la que queráis, pero los planos son sagrados. Ahora bien, si se trata de cambiar al perro para que el amo esté guapo (una industria muy floreciente) empiezan a ponerse restricciones para actuar sobre el fenotipo (por ejemplo, cortar el rabo) pero hay barra libre si se actúa sobre el genotipo. Da igual que el resultado de milenios de selección artificial sean aberraciones biológicas como lo son decenas de razas y millones de perros condenados a una vida horrible y enferma, lo importante es que sus amos estén contentos y luzcan bien. ¿Quieres ese color de ojos?, selección artificial y que se jodan. En esto acabaron los lobos. ¡Ay, cuánto los queremos porque a quien de verdad queremos es a nosotros!

18/3/17

ANTIVACUNAS ANQUILOSANTE


Hay personas afortunadas que pueden guardar en su memoria un momento de su infancia así de maravilloso: “Recuerdo aquel día perfectamente. Las televisiones fueron a nuestra escuela. Los niños corrían por las calles. Se suspendieron las clases. Sonaban los silbatos de las fábricas. Repicaban las campanas de las iglesias. La gente lloraba. Era como si hubiera terminado una guerra. Y, en cierta forma, había terminado una guerra”.

Este es el recuerdo de una señora que revive cómo de niña fue testigo y protagonista de un momento histórico, emocionante e inolvidable. Aquel día, tras mucho esperar, se hizo público el éxito de la primera gran campaña de vacunación contra la poliomielitis con el suero creado por el investigador Jonas Salk y su equipo, grandes personas dirigidas por una persona inmensa. Ella estuvo allí y fue vacunada. Nunca lo olvidará. Primero, porque está viva y sin polio. Segundo, porque de más de 50.000 afectados al año que había solo en EEUU, se pasó a que la polio esté erradicada en casi todo el mundo. Cuando los antivacunas logren algo así, cuando alguno de esa tropa deje de poner palos en las ruedas y se dedique a investigar, trabajar, descubrir, mejorar y salvar tantas vidas como hizo Salk, deberían dedicarle un reportaje tan revelador, fascinante e inspirador como “La vacuna que cambió el mundo”, emitido por La 2 hace un año y reemitido esta semana.

El documental comenzó recordando de dónde venimos: en el siglo XX la esperanza de vida aumentó varias décadas fundamentalmente gracias a las vacunas. Tosferina, rubeola, sarampión, difteria o poliomielitis deformaban, anquilosaban y mataban a miles y miles de personas, sobre todo niños. Pero no terminó con un final feliz. “No se puede patentar el Sol, el Sol es para la gente. Esta vacuna es un regalo de la ciencia para la gente”, dijo —e hizo— Salk. Su hijo añadió: “Mi padre se preguntó todos los días durante el resto de su vida por qué no se puede hacer lo mismo con otras cosas, como la pobreza o la salud pública”.

El presidente Eisenhower, ya abuelo, se emocionó pensando en sus nietos cuando felicitó a Salk. Yo me emocioné recordando a mi abuelo Tomás, que con una mano anquilosada por la polio vio vacunar a sus nietos.

17/3/17

SÓLO ME FALTA UNA TAMARA FALCÓ ATEA

No se trata de retirar la misa católica de los domingos en La 2. Se trata de emitir un nuevo programa, antes o después de esa misa, en donde se expliquen las mentiras del credo católico, se analicen de forma descreída sus prácticas -por ejemplo, comerse a su dios-, y se muestre el papel de las religiones en la perpetuación de una sociedad injusta e indigna. No se trata de terminar con los programas que TVE concede a musulmanes, judíos, protestantes y católicos para que expongan su visión del mundo y los fundamentos de sus creencias. Se trata de que también se nos conceda a los ateos un espacio semejante para defender las bases filosóficas y morales de una existencia sin dioses sobrenaturales, almas inmortales y verdades reveladas a unos elegidos que sólo coinciden en llevar gorritos de mamarracho. No se trata de negar el derecho de los creyentes a encontrar en la televisión pública espacios que les ayuden a practicar su fe. Se trata de concederles a los ateos ese mismo derecho a media hora semanal de televisión pública en donde se desarrolle, se complete, se contextualice y se celebre su sana y digna forma de ver la vida. No se trata de atacar la religión. Se trata de defender el ateísmo.

La proposición no de ley presentada por Podemos para solicitar que TVE no emita ritos religiosos de ninguna confesión ha tenido dos consecuencias desastrosas. Por un lado, la misa de La 2 del pasado domingo ha sido la más vista de la historia, obrando Pablo Iglesias sobre esa audiencia el mismo milagro que Jesús de Nazaret obró con los panes y los peces. Por el otro, Tamara Falcó ha abandonado su tibieza habitual y ha abanderado una recogida de sagradas formas, perdón, de sagradas firmas propugnando el mantenimiento de la eucaristía catódica. En el momento de escribir estas líneas va por los 150.000 apoyos. No se trata de solicitar que TVE no emita ritos religiosos. Se trata de solicitar que TVE también emita una visión crítica contraria a ellos. Tengo mil ideas para asegurar que el programa ateo ganaría en audiencia a la misa empoderada por Podemos. Sólo me falta encontrar a una Tamara Falcó atea.

16/3/17

LA MIERDA Y "GH VIP"


I. Hasta ahora, cada vez que nos referíamos a “la mierda de ‘GH VIP’”, utilizábamos la voz “mierda” en un sentido amplio, más cercano a las últimas acepciones que recoge la RAE que a las primeras. Ya no. Aída Nízar se ha encargado de dar una literalidad a dicha expresión que obliga a los críticos a buscar nuevos circunloquios para referirnos al programa de Mediaset. No sé lo que ocurrirá en la gala de hoy. No sé si se descubrirá que todo era mentira o si Jordi González también defecará en medio del plató. Lo que ya es indiscutible es que “GH VIP” es una auténtica mierda, sensu lato y sensu stricto, y sus espectadores son unos auténticos coprófagos.

II. En español pocas homonimias son tan chocantes como la referida a la palabra “escatología”. Dos derivaciones etimológicas independientes han confluido en esa misma grafía, significando, por un lado, el estudio teológico de las realidades últimas de la humanidad y el universo -a través de έσχατος: último-; y, por otro, la parte de la fisiología dedicada al estudio de los excrementos -a través de σκατό: caquitas-. Quizá alguno de ustedes haya visto titulares en donde se afirma que “GH VIP” ha dado un giro escatológico y se hayan ilusionado pensando que había entrado como nuevo concursante un very important teólogo, o que habían sorprendido a Aylén y Elettra discutiendo como perras sobre el preterismo dispensacionalista… No, no, nada de eso: los titulares de la prensa se refieren al contenido de los intestinos de Aída Nízar, que, aunque a ella le cueste creerlo, no tienen una conexión directa con la divinidad.

III. Una vieja leyenda ancestral cuenta que las diosas de la televisión reuniéronse para convivir una temporada en una casa situada en Guadalix de la Sierra. Dos de ellas afanáronse en gastar una broma a otra, y la diosa de la televisión embromada, orgullosa y resentida, colocose en cuclillas sobre el suelo del cuarto de baño y defecó una cadena de televisión, a la que puso por nombre Telecinco. En antiguos bajorrelieves sumerios se recoge la escena, y se pueden apreciar con nitidez, embadurnados entre las heces, los rostros de Jordi González y Sandra Barneda.

15/3/17

TRUMP, ALF Y EL SECADOR DE PELO


La información del tiempo se ha independizado de la información general que ofrecen los telediarios de un modo que quizás podría inspirar a los independentistas catalanes. Así, España no sería una unidad de destino en lo universal ni una nación de naciones, sino un telediario con secciones independientes: nacional, internacional, sucesos, deporte o información del tiempo. Cataluña es a España lo que la información del tiempo es al telediario. Bueno, sólo era una idea. No creo que Puigdemont y sus cuates de la CUP se conformen con ser la información del tiempo de los telediarios, pero sí estoy convencido de que Donald Trump necesita una sección propia al mismo nivel que la información deportiva o meteorológica.

Las decisiones del Increíble Hombre Naranja son, en su ignorante audacia, cada vez más peligrosas. El presidente de los Estados Unidos necesita muchas cosas, entre ellas un Alf, el extraterrestre del planeta Melmac que protagonizaba la divertida serie de televisión, que le recuerde, como hizo Alf con el padre de los Tanner, que tiene caspa más antigua que su país. La caspa de Alf, de la vieja Europa y de la sólida tradición estadounidense representada por la Estatua de la Libertad y por los chicos de la prensa es mucho más antigua que las recetas que quiere imponer Donald Trump y, por lo tanto, esa caspa merece un respeto. Trump no es lo bastante listo como para entender que necesita asesores como Alf, por eso llena los telediarios de barbaridades que tienen como hilo conductor el odio, la ignorancia y la seguridad en que los problemas complicados se resuelven con soluciones simples a base de muros, prohibiciones, ensimismamiento e insultos a la prensa. La información del tiempo se ha convertido en la Cataluña de los telediarios, y la información sobre Trump necesita también un espacio propio y diferenciado que nos permita distinguir las noticias internacionales, económicas o los sucesos de las decisiones de Trump que no por ser estúpidas tendrán menos influencia en la política internacional, en la economía y hasta en los sucesos. Por cierto, Alf huyó de su planeta cuando estaba a punto de estallar porque todos los habitantes de Melmac enchufaron los secadores de pelo al mismo tiempo. No sé lo que pasará en el planeta Tierra el día en que Trump y Puigdemont enciendan a la vez sus secadores de pelo.

14/3/17

CORRUPTOS, GOLFOS, TRAMPOSOS Y VIVIDORES


“iFamily” no defrauda. TVE, tampoco. En eso se parecen. Un personaje de “iFamily” finge estar en coma. TVE finge no estarlo. En eso se diferencian. Quienes tuvieron la santa paciencia de comerse el plato enterito del primer capítulo de esta serie (desde el punto de vista numérico, pocos. Desde el punto de vista humanitario, demasiados) confirman lo que se veía venir de lejos.

Y de lejos no se veía venir nada bueno: “iFamily” es una nueva serie familiar para toda la familia que, primero, se veía venir que no iba a ser nueva y no lo fue a no ser que uno no hubiera visto la tele en los últimos treinta años; que, segundo, se veía venir que no iba a ser para toda la familia y no lo fue a no ser que uno no se quisiera nada ni a sí mismo ni a su familia; y que, tercero, eso sí que sí, se veía venir que iba a ser familiar y lo fue. Familiar a más no poder. Tan familiar que primero supimos que su productor había sido productor de “Ana y los 7”. Tan familiar que después supimos que su guionista había sido guionista de “Ana y los 7”. Y tan familiar que, cuando vimos la foto familiar de la serie en la presentación antes del estreno, nos resultó, efectivamente, familiar. No había siete niños porque hay que ahorrar, pero había cuatro. No estaba Ana Obregón porque hay que respetar la Convención de Ginebra, pero estaba Antonio ‘Serrano’ Resines.

Hoy por la noche emiten el segundo capítulo de “iFamily”. Avisados están como avisados estaban quienes picaron y vieron el primero. De todas formas, algo bueno tiene. Quien se perdiera las series españolas más rancias de las últimas décadas y quisiera recuperarlas, puede recurrir a “iFamily” para ver un compendio. Y si en los noventa la serie “Lleno, por favor” sirvió para que los españoles comprendiéramos que un franquista nacionalista machista podía ser un tipo simpaticote y entrañable, ahora “iFamily” puede servir para que TVE nos haga comprender que los entrañables y simpaticotes del presente son los corruptos, golfos, tramposos y vividores. Así, cuando vemos los telediarios, se nos hacen más llevaderos.

13/3/17

NIÑOS EDUCANDO A NIÑOS


Existen testimonios documentales que indican que hubo una época remota en la cual las diferentes etapas de la vida se iban sucediendo consecutivamente. Uno era primero niño, luego joven, luego adulto, y finalmente anciano. No era funcional ser adulto a los cinco años de edad, ni era funcional ser niño a los cincuenta. Después, sin que nadie sepa exactamente cuándo empezó a ocurrir, las etapas de la vida se convirtieron en estados emocionales elásticos, no excluyentes, superpuestos. Hoy en día los especialistas consideran que la adolescencia se extiende desde la pubertad hasta la menopausia. La edad adulta tiene un pequeño brote durante la segunda infancia, después desaparece hasta reaparecer en la cincuentena. La vejez comienza alrededor de los veinticinco años. Y la infancia es un estado perpetuo gracias al sencillo silogismo que tiene como premisas que el cien por cien de la programación va dirigida a niños y que no hay ninguna franja de edad que no sea consumidora de televisión.

Por eso la televisión pública ha renovado la noche de sus sábados mediante dos nuevos programas infantiles, que son los que van dirigidos a un mayor espectro de espectadores. En “El árbol de los deseos” Edu Soto, -todos lo recordamos por su personaje de aquel niño llamado “el Neng”- interpreta a otro niño habitante de un árbol que cumple los deseos de los niños. En “Jugando con las estrellas” parejas de famosos con hijos compiten entre ellas sin que nadie en una prueba ciega pudiera distinguir a la persona de cuarenta años y a la de ocho. Ya Carl Jung destacó cómo la presencia de instancias demiúrgicas que cumplen los deseos de los niños es una constante en las leyendas y cuentos infantiles de la especie humana. Y la empatía entre Cayetana Guillén Cuervo y su hijo prueba que la edad -sí, amigos, no sólo la nacionalidad, el sexo o la ideología, también la edad- ha dejado de tener que ver con nada objetivo y ha caído devorada por el sentimientocentrismo.

La televisión infantil es la nueva televisión generalista en una sociedad de niños educando a niños. La realidad en televisión sólo se ofrece en cadenas de pago.

12/3/17

EL EJE DEL MAL


Olvídense de Irán y de Corea del Norte. Olvídense de Hitler y Mussolini. Olvídense incluso de Milá Ximénez y Kiko Hernández. El auténtico eje del mal lo forman Bertín Osborne e Íker Jiménez. La entente perfecta para acabar con cualquier rastro de calidad en la televisión. A la derecha, Bertín, el único conversador conservador capaz de enfrentarse a un personaje carente de interés y no hacerle ni una pregunta durante hora y media que haga que lo adquiera. Más a la derecha, Íker, décadas de investigador de lo paranormal tras las que reconoce que no sabemos ni una milésima más de lo que sabía el hombre de Altamira. El oscurantismo es más sórdido si es casposo; la caspa es más sucia si es oscurantista. Por separado ya resultan rivales difíciles. Juntos son imbatibles en su apología de la ignorancia, en su celebración de la irracionalidad y el aburrimiento. Si la religión es el opio del pueblo, Osborne y Jiménez se convierten en el vino Don Simón de la España del siglo XXI. Mediaset siempre tuvo forma de tetrabrick.

Es sabido que cuando dos males se juntan no se suman, sino que se multiplican. En el último “Mi casa es la tuya” (o “Esta casa es tu casa” o “Ay, mira, tu casa es como la mía” o algo así) Bertín and wife recibieron a Íker and wife y celebraron una auténtica cumbre del G2 del mal. Moriarty y Lex Luthor no hubieran podido mantener una conversación en la que se afirme que la principal pregunta que ha de responder Rajoy es relativa a la desclasificación de informes sobre los ovnis. Fu-Manchú y el Joker no hubieran podido hacer el ridículo espantoso de escuchar unas psicofonías en las que no se entiende nada si no te dicen antes lo que tienes que entender, y encima fingir que te da miedo. Pues yo una vez me puse una bata de una tía que había muerto y sentí como que me la agarraban desde atrás. Pues a mí me tocaron en el hombro una noche y no había nadie. Uy, eso pasa mucho. ¡No jodas! Qué acojone. Me voy de aquí.

Bertín Osborne e Íker Jiménez. Ya conquistaron Telecinco, y ahora, si no hacemos algo para impedirlo, el Eje del Mal conquistará el mundo cantando rancheras y fotografiando las caras de Bélmez.

11/3/17

NO SE NACE HELENA RESANO: SE LLEGA A SERLO



Día Internacional de la Mujer. Así abrió Helena Resano “laSexta Noticias”: “Hoy mi firma no va a ser ‘Helena Resano’. Hoy firmo como ‘mujer’. Y todas las mujeres que hacemos este informativo hemos decidido firmar nuestros vídeos así para reivindicar el papel de la mujer en este informativo”. En la edición de la noche, Cristina Saavedra hizo lo mismo. Bajo ellas no estaba el habitual cartelito con su nombre, sino uno que solo decía “Una mujer”.

¿Ser “una mujer” define a Resano o a Saavedra? Mal estarían las cosas en la lucha por la igualdad si eso fuera así. Y mal estarán si seguimos por ahí. Significaría que Resano y Saavedra, y por extensión todas las trabajadoras, podrían ser sustituidas en su trabajo por cualquiera que cumpliera la condición de ser “una mujer”. Implicaría que ser “una mujer” es su cualificación y su competencia profesional. Supondría que todo lo que han aprendido con esfuerzo y saben hacer con excelencia se disuelve en lo que son. O, peor, en lo que se espera que sean. Dice la filósofa Celia Amorós: “Hemos establecido, de acuerdo con Simone de Beauvoir, que ‘la mujer’ es una heterodesignación. A diferencia de las mujeres empíricas, que son muy diferentes cosas, ‘la mujer’ como término genérico expresa la idea de los varones acerca de cómo las mujeres deben ser, de qué modo deberán encarnar lo que a ellos se les antoja como ‘lo femenino’. La heterodesignación patriarcal manifiesta así lo que denominamos ‘la feminidad normativa’ y tiene efectos de estereotipia”.

El mismo día, “La 2 Noticias” de Mara Torres habló del currículum ciego, que borra cualquier rastro del sexo del o la solicitante como primer paso para evitar la discriminación en la selección de personal. Visita urgente a Wikipedia. Afortunadamente, presenta a las tres por su preparación y trayectoria profesional. Solo al final las indexa en la categoría de “mujeres” como Pedro Piqueras está en “hombres” o “albaceteños”. Tal vez habría que abandonar el esencialismo platónico y cambiar el Día Internacional de “la Mujer” por el de “las mujeres”. Las concretas, las empíricas, las que, sin estereotipos, son muy diferentes cosas.

10/3/17

LA ARBITRARIEDAD DE LA CARIDAD


Tras el “Caso Nadia”, el “Caso Paco Sanz”. Lo destapó anteayer “Espejo público” (mañanas de Antena 3). Ya saben cómo va esto: es una enfermedad rara pero me tocó, no dan esperanzas pero no me rindo, hay un tratamiento experimental pero no hay garantías, hay que ser positivos pero esto es duro, no hay que rendirse pero solo no puedo, hay que ir a Estados Unidos pero es muy caro, os agradezco el apoyo pero más el dinero. La primera palabra es enfermedad. La última, dinero. En medio, una campaña mediática en la que la tele sirve de caja de resonancia y los famosos son víctimas que abren la puerta a más víctimas aun.

Risto Mejide fue una de ellas. Y, por supuesto, como a todos los engañados, no hay nada que reprocharles. Pero sí deberíamos aprender algo. No parece prudente dejar la asistencia a los necesitados fuera de la protección social del Estado y en manos de campañas sin control externo ni supervisión oficial ninguna. No parece que la manera en que la sociedad deba enfrentar estas situaciones sea confiar en lo bien que los afectados den pena en pantalla, en lo eficaces que sean inspirando compasión y en lo hábiles que resulten haciendo sentirse mal a quienes nos encontramos bien. ¿Se acuerdan de cuando, hace un par de años, Toñi Moreno mostraba en “Entre todos” (La 1) aquella retahíla de desdichas que cada tarde competían a ver quién conseguía más llamadas y más limosnas?

Dos meses después de Nadia y un mes antes de Paco Sanz, Mejide fue muy crítico en “Chester in love” con el presidente de la asociación “Europa Laica”. Ya lo contamos. Antonio Gómez pidió que los servicios sociales del Estado hicieran su trabajo y no delegaran en la caridad. Risto le paró los pies porque en el Estado hay mucha corrupción. No, Risto. Si hubiera corrupción policial, la solución no sería disolver ni privatizar, sino mejorar la policía. Si hubiera corrupción en los servicios sociales, la solución no sería la privatización o la caridad, sino mejorar los servicios sociales. Ya lo vemos: la caridad, y más llevada por impulsos, es más arriesgada, menos justa, más arbitraria.

9/3/17

MERCEDES MILÁ PRODIGIOSA, ¡VAYA TIMO!


Los altibajos en la carrera televisiva de Mercedes Milá son desconcertantes, y más teniendo en cuenta que lo que para unos serán momentos altos para otros son bajos, muy bajos. Pero Milá siempre mantiene una constante: esté en el programa que esté y haga lo que haga, es un animal televisivo imparable. Por eso no debería sorprender la mala educación, la arrogancia y la falta de respeto con la que se comportó en “Chester in love” (noche del domingo, en Cuatro) con un profesor de biotecnología que, como a ella, Risto Mejide había invitado al programa.

Acostumbrada a llevar la voz cantante, a ser quien da y quita la palabra, a mandar en el plató, no se limitó a ponerse un poco chula como hizo en “El hormiguero”, (zasca a Pablo Motos por no estar al tanto de “Convénzeme”, en Be Mad, su último programa). Milá se puso directamente borde. José Miguel Mulet explicó que el libro “La enzima prodigiosa”, de Hiromi Shinya, del que ella es una gran defensora, está repleto de falacias empezando por que las enzimas prodigiosas no existen. Milá cortó al investigador, divulgador y profesor universitario con un argumento irrebatible: de eso nada porque él estaba gordo y debía adelgazar. Hay quienes se indignaron ante semejante respuesta, pero, si nos fijamos, Milá solo hizo lo mismo de siempre: ser un animal televisivo. Una vez más, fue la dueña del plató y contestó por las bravas para dar espectáculo, como siempre hizo en “Gran hermano” con quien se portaba mal. Contestar “no tienes razón porque estás gordo” demuestra que ser un animal televisivo es una cosa y ser un animal racional, otra.

Por eso, el auténtico protagonista del encontronazo no fue Milá, sino Mulet. Resumió lo ocurrido de forma certera: “Lo que hay que aguantar para que te dejen hablar de enzimología por la tele”. Con una televisión pública ausente, divulgar ciencia en España es sufrir. Hay quien accede incluso a visitar “Cuarto milenio” para intentarlo, como de hecho también hizo alguna vez el propio Mulet. Hay que ver lo que tienen que aguantar los estudiosos serios, los investigadores de verdad, los especialistas rigurosos para que les dejen hablar por la tele.

8/3/17

YEAH, YEAH, YEAH


Gracias a la descacharrante película “In & Out” aprendimos, mientras el profesor Brackett escuchaba el casete de autoayuda para comportarse como un auténtico macho, que los hombres de verdad no bailan, ni siquiera cuando suena “I Will Survive” de Gloria Gaynor. Arnold Schwarzenegger no baila. Y punto. En el capítulo de “Destinos de película” (TVE) dedicado a Venecia, nos enteramos de que los gondoleros no cantan, y que la culpa de que los  turistas que visitan Venecia crean que los gondoleros cantan mientras serpentean por los canales es de Alberto Sordi y la película “Venecia, la Luna y tú”. De acuerdo, los machotes no bailan y los gondoleros no cantan. ¿Y los aficionados al fútbol? ¿Puede un futbolero bailar y cantar en el estadio, o debe limitarse a gritar, aplaudir, silbar y abuchear? ¿Los futboleros de verdad pueden bailar y cantar como el profesor Brackett y Alberto Sordi, o deben olvidarse de Gloria Gaynor y de los canales venecianos? La repuesta a estas cuestiones está en “Eight Day´s a Week” (Movistar+), el precioso documental dirigido por Ron Howard que recoge la trayectoria de los Beatles desde los tugurios de Hamburgo y el mítico “The Cavern” hasta los conciertos multitudinarios en los que la música quedaba sepultada bajo los gritos de los fans.

18 de abril de 1964. Estadio de Anfield. Los aficionados del Liverpool, en su mayoría varones de clase trabajadora, bailan y cantan “She Loves You”, la canción de los Beatles que significó el comienzo de una aventura musical tan rompedora e inesperada como el Imperio que construyó Alejandro Magno. El profesor Brackett tenía razón. Bailar es divertido. Los gondoleros de la película “Venecia, la Luna y tú” tienen razón. Cantar mientras las góndolas navegan por los canales de Venecia es divertido. Los aficionados del Liverpool tienen razón. Es divertido bailar y cantar “She Loves You” en Anfield o en cualquier estadio. Los machotes de las tertulias televisivas de ultraderecha no bailan. Los estrictos gondoleros que imponen los recortes y defienden eso que llaman “austeridad” aunque los canales se sequen no cantan. ¿Los culés quieren que hoy el Barça elimine al PSG? Más Gloria Gaynor, más canales musicales y más “yeah, yeah, yeah”. Messi tiene que bailar, Iniesta tiene que cantar y el Camp Nou necesita más a los Beatles que a Alejandro Magno.

7/3/17

LA ÚLTIMA FRASE SOBRE EL HOMBRE DE NEGRO

¿Cómo que el Hombre de Negro abandona “El hormiguero” porque no lo puede compatibilizar con sus nuevos proyectos? Estamos hablando de alguien que celebra los trofeos del Barça en La Cibeles, que piratea música en casa de Ramoncín, al que le sirven Big Macs en Burger King, que puede poner más de 140 caracteres en twitter, que se come el hueso y tira la aceituna, que toma aspirinas efervescentes sin agua, que usa destornilladores de estrella en tornillos planos, que se comió una tarta sin darse cuenta de que tenía dentro una stripper, al que el Bic naranja le escribe normal, que toma Red Bull para relajarse, que fuma en casa de Mercedes Milá, que come pinchos de tortilla sin quitar el palillo, que fue a “Hombres y mujeres y viceversa” y se ligó a Emma García. Podría creerme que Manolo Sarriá, o Marron, o el Monaguillo dejasen “El hormiguero” porque quieren emprender nuevos proyectos que les impiden aparecer a diario en el programa de Pablo Motos. Pero el Hombre de Negro… ¿de qué sirve salir sobrio de la fiesta de Blas, comprar sólo 2 cuando hay ofertas de 3 por 2, hacer llorar a Pérez Reverte, correr los encierros de San Fermín en dirección contraria, bucear con bombonas de gas butano, tener la voz más grave al aspirar helio, poder dividir por cero, rascarse el codo derecho con la mano derecha, tener prepucio y pucio y postpucio, pintar con las ceras blancas en folios blancos y que se vea, cruzar las calles a lo largo, poder borrar archivos en el ordenador sin que éste se atreva a preguntar “¿estás seguro?”, si después no se es capaz de grabar discos, ser el único miembro de una startup de juegos de ordenador, hacer giras por todo el país y llevar a la vez la sección más divertida del principal magacine diario de la televisión generalista española?

Aunque el Hombre de Negro aún no ha hablado, su representante ha confirmado que no lo volveremos a ver junto a Pablo Motos. ¿Representante? ¿El Hombre de Negro es representable? Por favor, Trancas y Barrancas, tenéis que decir esta semana la última frase sobre el Hombre de Negro, la que cierre el mito para siempre. Yo propongo ésta: el Hombre de Negro es capaz de continuar en “El hormiguero” incluso cuando ya ha abandonado el programa.

6/3/17

TU PEZÓN ME SUENA


En la gala final de la recién terminada edición de “Tu cara me suena” Lorena Gómez, llevada por el furor de la recreación que estaba haciendo de Rocío Jurado, hizo un movimiento impetuoso que le llevó a mostrar parcialmente uno de sus pezones durante dos o tres décimas de segundo. Resultado: trending topic mundial. Uno de los vídeos virales más visto en las redes durante estos días. Titular en todas las páginas de internet dedicadas al mundo de la televisión. ¿Era verde, o azul, o estaba coloreado a rayas como el arco iris? No, era un pezón color pezón tirando a pezón. ¿A lo mejor tenía alguna forma poco habitual extravagante… no sé… era cuadrado, piramidal, estaba situado en un borde de la mama en vez de estar en su centro? No, aunque sólo se apreció mínimamente, nada indicó que su forma y localización no fuera la habitual de los pezones en la especie humana. ¿Poseía alguna otra particularidad que mereciera ser destacada? ¿Se cogía la wifi con él, se disparaba como los de Afrodita la de Mazinger, era un emoticono con una carita sonriente que guiñaba un ojo? Tampoco.

Entonces, ¿por qué el revuelo? ¿Quizá existía una leyenda urbana previa que señalaba que Lorena Gómez carecía de pezones y la audiencia ha saltado sobresaltada -la redundancia es intencional- al comprobar su error? ¿Se parecía mucho la sección de pezón emergido de Lorena Gómez a la correlativa sección de pezón de Rocío Jurado completando así la caracterización y la imitación del personaje? ¿Ha entrado recientemente Teherán TV en el accionariado de Atresmedia? No, no y no. Un inesperado fallo en los mecanismos de mantenimiento de las más arraigadas normas sociales abre una brecha por la que se cuela lo prohibido, y lo prohibido no tiene otro interés que el que le otorga su condición de prohibido. Lo verdaderamente dramático de los tabúes es comprobar la absolutísima banalidad de las cuestiones que encubren. Toda una civilización construida para impedir que la areola y los corpúsculos de Morgagni de Lorena Gómez vean la luz. Tu pezón me suena. Especialmente porque son todos iguales. Boys, boys, boys...

5/3/17

LA MALA BABA DE CARLOS HERRERA


A veces disparan entre cadenas: “Órbita Laika”, de La 2, criticando la apología de las pseudociencias de “Cuarto milenio”, en Cuatro. A veces disparan dentro de la propia cadena: el director de contenidos de “Salvados” (laSexta), Juanlu de Paolis, manifestó su vergüenza por compartir cadena con Eduardo Inda y Paco Marhuenda (“laSexta Noche”). Hay quien parece atraer los tiroteos porque va por la vida y por la tele como los pistoleros del lejano Oeste: Javier Cárdenas (“Hora punta”, en La 1) contra Gestmusic (productora que lanzó su actual programa), Javier Cárdenas contra Buenafuente (“Late motiv”, en #0), Javier Cárdenas contra Eva Hache (“Got talent”, en Telecinco) por la entrevista que concedió a Risto Mejide (“Chester in love”, en Cuatro), Javier Cárdenas contra toda la competencia en su franja horaria (“El hormiguero”, en Antena 3; “El intermedio”, en laSexta; y “First dates”, en Cuatro) asegurando que él es “la opción más vista” (algo que efectivamente a veces ocurre cuando esos tres programas ya terminaron y él todavía sigue dando la tabarra).

Darle gusto al gatillo será divertido, pero peligroso. Carlos Herrera (“Herrera en 13TV”, en 13 TV; “El programa de Ana Rosa”, en Telecinco) aprovechó su programa en la Cope para amar al prójimo poniendo la otra mejilla y perdonando 70 veces 7 a quienes triunfaron en la “Gala Drag Queen” de La 2: “Estos tipos vestidos de mamarracho y haciendo mamarrachadas por las calles, que podrían disfrazarse de cualquier cosa… que se disfracen de cómo va su madre, por ejemplo, que seguramente sería mucho más interesante”. Bang. Pero la ilusión de Héctor, un joven canario con síndrome de Down, no es conocer a un futbolista, actor o cantante (algo que en la tele ya vimos mil veces); la ilusión de Héctor es, ay, ser reina en la “Gala Drag Queen”. Telecinco arrimó el ascua a su sardina y “Cámbiame” le dio la alegría de su vida. El resultado no se parecía a cómo va su madre, así que Herrera debería pedirle perdón y retirar lo de “mamarracho”, no vaya a ser que la bala, el insulto y la mala baba reboten, reboten, y en su culo exploten.

4/3/17

"HAZTE OÍR" LO ENSEÑA TODO


Como mensaje faltoso, vale. El autobús de “Hazte oír” que recorre las teles canal arriba y canal abajo está logrado porque alcanza un nivel de gilipollez sobresaliente con gran sencillez, pero como mensaje ultra es una birria. Es que ser ultra no es tan fácil. Siempre hay otro más ultra que tú que por comparación te hace parecer un moderado de mierda. A su lado, en vez de un ultra con un par de huevos pareces un tibio, un cobarde, un acojonao. Por ejemplo, si vieran ese autobús el frutero de “7 vidas” o Mauricio Colmenero de “Aida” lo despreciarían por andar con tanta pamplina de esa que ellos llamarían mariconada. Empezando por los dibujitos de los niños. Si el niño y la niña son lo que son porque entre las piernas tienen lo que tienen, a ver a santo de qué dibujan al niño con un pantaloncito corto y a la niña con faldas y coletas. ¿No ven que usar esa mierda de rasgos sociales y culturales como forma de identificación contradice la faltosada del texto? ¿Dónde se vio un niño sin paquete? Pues venga ese dibujante, que enseñe la mercancía, joder.

Y que no se alegren los blandengues de “Hazte oír” porque su vergonzoso autobús ultra moderado ya no circule por las calles. Su mensaje cobarde y fofo continúa circulando por todas las televisiones. Por no hablar del cachondeo que hacen a su costa en “El intermedio” o en “Zapeando”. Mientras, en todos los informativos entra como una bala y los adelanta por la ultraderecha ese eurodiputadote polaco racista, xenófobo, machista y antisemita que llama a las cosas por su nombre. Como hacían los hombres de antes. Como hacen los hombres de verdad. Como no hacen en “Hazte oír” porque no tienen lo que hay que tener, que según el autobús es pene pero según otros es simplemente valor para mostrarse tal y como son. Qué vergüenza tienen que estar pasando en “Hazte oír” viendo que si el autobús no hubiera caído en sus manos blandengues sino en las de ese machote sin civilizar, la niña además de tener vulva habría sido dibujada como son todas las mujeres: más pequeñas, más débiles, menos inteligentes y con un peor futuro laboral porque se lo merecen.

3/3/17

¿RATAS EN EL CARNAVAL DE LAS PALMAS?

Me llamaron tanto la atención las declaraciones de monseñor Francisco Cases, obispo de Canarias, que acudí corriendo a la web de RTVE para ver qué había pasado. En su comunicado Cases señalaba que, hasta este 27 de febrero, el día más triste de su estancia en las islas había sido el del accidente de Spanair de 2008 en el que fallecieron 154 personas; pero que el pasado lunes 27 se había convertido en el nuevo día más triste de su estancia en Canarias debido a lo ocurrido en la gala Drag del Carnaval de Las Palmas. Yo no vi la gala, pero, como había sido emitida por La 2, tendría que estar disponible en la página de RTVE a la Carta. ¿Qué podría ser peor que 154 muertos? A lo mejor un terremoto, un atentado terrorista, el desplome de un edificio, una epidemia de algún mal fulminante… Quizá los excesos del carnaval habían desembocado en hordas tumultuosas que arrasaron la ciudad. Se espera de un alto prelado de la Iglesia Católica que tenga un rastro de sensibilidad, un mínimo entendimiento para no banalizar ciento cincuenta muertes. Habría que ser muy pero que muy miserable para lamentar menos un accidente de aviación masivo que... yo qué sé... por inventarme algo, una blasfemia, por muy bestia que fuera. Seguro que Cases no es tan mezquino. Seguro que ese día en Las Palmas ocurrió alguna tragedia en donde las víctimas mortales se contaron por cientos y que por algún raro motivo no ocupó la primera página de los periódicos.

Pero resulta que la gala Drag ha desaparecido de la página web de RTVE. Nadie sabe por qué. Estuvo, pero se ha retirado. El Consejo de Informativos del ente público ha denunciado la situación y pide explicaciones. A lo mejor es algo parecido a lo que ocurrió en la televisión norteamericana tras el 11-S, y nuestra televisión pública no quiere ofrecer imágenes terriblemente sangrientas y dolorosas de los fallecidos. Y a lo mejor, no, a lo mejor ni siquiera hubo fallecidos y el club al que pertenece el obispo susodicho tiene algo que ver en la misteriosa desaparición. El caso es que, por una u otra cosa, sigo sin enterarme de qué horror -¡peor que un accidente con 154 muertos!- ocurrió en aquella gala. ¿Alguien puede contármelo? Tengo curiosidad por saber si monseñor Francisco Cases es alguien con valores deseables en nuestra sociedad o es un psicópata con la altura moral de una rata de alcantarilla.

2/3/17

LA PACIENCIA DE LOS PACIENTES


¿Qué es más perverso, tratar el fallecimiento de un enfermo de cáncer como si fuera una derrota en una lucha (“luchó con todas sus fuerzas pero no pudo vencer”) o tratar la curación de un enfermo de cáncer como si fuera una victoria en una lucha (“luchó con todas sus fuerzas y consiguió vencer”)? Cuando ocurre lo primero -lo hemos visto estos días-, los medios se muestran más prudentes y ponen cierta sordina al mensaje que la alianza de felicidólogos, neurocursis y vendedores de crecepelo ha extendido, según el cual el cáncer supone ante todo una nueva ocasión para ser superguays. Pero cuando ocurre lo segundo, y una persona famosa se cura gra-cias a la me-di-ci-na, esa épica mentirosa llama a rebato y por todas partes se vincula la curación con la actitud emocional heroica que el enfermo logró mantener a pesar de su difícil situación. Sin embargo, por pura lógica aristotélica, es imposible atribuir la curación a la lucha sin atribuir la no curación a la falta de lucha del paciente.

Porque, sí, guste o no guste, el enfermo es un “paciente”, palabra vinculada en su origen con “pasión”, “pasividad”, “pasar”, y cuyo significado abraza esa borrosa área de la vida ante la que inevitablemente somos sujetos pasivos (“sujetos” y “pasivos”). Por supuesto, siempre será mejor estar de buen que de mal humor, animado que desanimado ante un atasco de tráfico, ante un despido inesperado, también ante el cáncer. Pero tergiversar esta obviedad hasta pretender convertirla en un mensaje salvífico es desquiciarla. Pudiera incluso justificarse este engaño si el enfoque misterwonderfuliano de la enfermedad supusiera un apoyo y fuera bien recibido por el enfermo; sin embargo, una buena parte de las personas de mi entorno que han sufrido o sufren cáncer se muestra harta e irritada por este tono pijo que se lleva por delante con su optimismo ciego a buena parte de los enfermos -por ejemplo, a los de cáncer metastásico, de los que nunca se habla-. La única lucha que cabe librar contra el cáncer es la política, la que decide los fondos que se dedican a la investigación, la prevención y el tratamiento, y ésa no se pelea con canciones de amor a la vida sino con votos en las urnas. Intentemos aliviar a los enfermos de esta carga de falsa responsabilidad añadida a su enfermedad que finge poner en sus manos un control que simplemente no tienen. Son pacientes, por mucho que tanta tontería esté acabando con su paciencia.

1/3/17

TALENTARIADO

Juan Carlos Ortega sólo cuenta con su talento. Luis Piedrahita sólo cuenta con su talento. Otros humoristas -algunos de ellos buenísimos, como el Gran Wyoming, los tres “Ilustres ignorantes” o los genios de amoníaco sulfúrico de “Mongolia”- usan también como recurso una cierta complicidad ideológico-existencial con sus espectadores que actúa como un arma de doble filo: por un lado, les gana una simpatía de entrada que amplifica la respuesta humorística del oyente; por otro, les aplasta con un techo de cristal que impide que su audiencia pueda crecer indefinidamente de forma proporcional a la calidad de su sátira. Pero Ortega y Piedrahita se presentan ante el público con una única herramienta, sólo una: su descomunal talento para el humor.

Cada carcajada que Luis Piedrahita arranca con sus intervenciones en “El hormiguero” está ganada con el sudor de su deslumbrante ingenio. Cada vez que Juan Carlos Ortega nos deja boquiabiertos con sus originalísimas ideas en “Late Motiv”, ese calorcito de alegría e inteligencia que nos dura a los espectadores minutos -u horas, e incluso a veces días- tiene como único ingrediente el humor en estado puro. Nadie les va a regalar una sola sonrisa por ser de los nuestros, por compartir enemigos, por ser guapos. Cada risa hay que remarla porque de entrada el viento no sopla a favor. He visto a centenares de personas reír ininterrumpidamente -lo juro, sin un segundo de descanso- durante ochenta minutos en el último espectáculo de Piedrahita. Conozco a serios profesionales, doctores y catedráticos, que atesoran los vídeos y los podcasts de Ortega con la exhaustividad de un fan adolescente, y que en caso de incendio correrían a salvarlos antes que a muchos familiares. Ambos fenómenos se explican apelando exclusivamente a un único don, el único que tienen, en el que lo basan todo: el talento.

Se define el proletariado ya desde la Roma imperial como la clase social carente de otra riqueza que no sea su propia prole. ¿Cómo podríamos llamar a esa clase de humoristas minimalistas que carecen de otra riqueza que no sea su talento desnudo y han de ganarse el pan únicamente con él? Yo propongo (música de lira, por favor) “talentariado”.