26/10/18

EN DEFENSA DE JORGE JAVIER VÁZQUEZ


Me gusta meterme con Jorge Javier Vázquez, explicar por qué me parece que sus programas son horrorosos, por qué miente cuando dice que solo hace entretenimiento sin ninguna responsabilidad social, por qué es tan tramposo como un trilero y tan trilero como un embaucador. Me gusta denunciar que todos sus programas no solo son malos, son también dañinos; que su esfuerzo por hacer bien su trabajo no solo no mejora las cosas, sino que sirve para construir una televisión y un mundo peor; que estando como está al servicio del reverso tenebroso de la fuerza, cuanto mejor profesional consiga ser, más peligroso y peor persona será.

Pero estos días unos cuantos descerebrados han decidido proclamar al mundo lo gilipollas que son, y, ya es fatalidad, no se les ha ocurrido mejor forma que lanzando amenazas y bravuconadas contra nuestro hombre. Creerán que como es famoso tiene obligación de aguantar, que la libertad de expresión incluye las amenazas personales y la intimidación, o que como somos muchos los que le criticamos, conseguirán un triste éxito inmediato de retuits y “me gusta” con el llenar sus vacías vidas. Y de eso nada. Es normal que Jorgeja, aburrido de “GH VIP” y “Sálvame”, se entretenga con “OT” opinando sobre la palabra “mariconez”  en aquella canción de Mecano. Y si quiere decir en las redes “Y a mí que en ese contexto no me ofende la palabra 'mariconez'. ¿Seré raro?”, que lo diga. Él decide lo que le ofende, y él decide si lo dice o no. Tiene exactamente el mismo derecho a hablar que quien contestó “A mí me molesta que presentes un programa donde la apología a la violación y el acoso a una persona no sean penalizados, ¿seré rara?”. Pero, ay, amenazarle con esperarle a la salida del trabajo, o desearle que le violen y otras barbaridades de ese calibre, ya es otra cosa que no podemos consentir.

Por eso defendemos a Jorgeja, porque queremos para él el mismo derecho a hablar con libertad y sin amenazas que queremos para nosotros y para todo el mundo. Algo a lo que no podemos renunciar ni dentro ni fuera de la televisión por mucho que nos guste meternos con Jorge Javier Vázquez.

1 comentario:

Antitigelino dijo...

Antonio, soy contigo.