30/9/15

FRAUDE EN "CÁMBIAME"


Un escándalo de dimensiones internacionales está a punto de dañar Mediaset. Hay serios indicios de que el grupo de comunicación ha trucado todos los programas “Cámbiame” emitidos por Telecinco en España y se sospecha que puede estar haciendo lo mismo en programas que la empresa matriz emite en Italia, lo que habría hecho con el fin de aprobar los estándares de salud social y mendioambiental de la Unión Europea.

Se sospecha que lo hizo instalando un software que detecta si el programa en cuestión está siendo sometido a las pruebas para comprobar el nivel de prejuicios contaminantes expulsados. Durante la retransmisión de los programas, estas emisiones son hasta 40 veces superiores a lo permitido, tal y como denuncia la Agencia de Protección Estatal Europea en un informe que ha trasladado a Bruselas.

En el fraude se ven involucrados diversos modelos de todas las marcas de “Cámbiame”: desde el inicial “Cámbiame” diario hasta el fracasado “Cámbiame premium”, pasando por el modelo recientemente lanzado al mercado “Cámbiame noche” y el prototipo “Top cámbiame” que no llegó a ser comercializado. Si bien, tal y como la filial española de la compañía italiana indica, “los programas afectados son absolutamente seguros y aptos para su visionado”, deberían someterse a un procedimiento para reparar esta treta.

Se teme que tenga duras consecuencias económicas y legales este fraude en la medidas de control establecidas para evitar que se viertan al medioambiente prejuicios e ideología capaz de contaminar a personas susceptibles de obsesionarse por su aspecto físico o de creerse que cambiando de peinado cambian de vida. Analistas internacionales señalan que Paolo Vasile tendría que dar un paso al frente para evitar el descalabro en bolsa, las demandas de los consumidores y el descrédito que puede suponer este escándalo para una marca hasta ahora “fiable”.

29/9/15

I+D+i EN TELECINCO



Las multas tienen que desgravar en Hacienda. No las tuyas o las mías, que somos unos pringaos, sino las de la tele. Porque aunque la tele haga las cosas bien ¡pueden multarla solo por incumplir la ley! ¿No hace falta más I+D+i?, ¿no es tan importante la investigación, el desarrollo y la innovación? ¿Por qué, entonces, multan a Telecinco por invertir en investigar entre la basura, desarrollar nuevos subproductos e innovar mezclando viejos elementos apestosos para producir novedosos programas hediondos garantizados?

Multas por incumplir los compromisos legales de fusión cuando Telecinco se zampó a Cuatro, multas por emitir una original forma de publicidad encubierta en “Sálvame” y en “¡Qué tiempo tan feliz!” que produce grandes ganancias sin que el público rechiste, multas por innovar en la forma de calificar por edad los programas para que los vea más gente, multas por interpretar de modo creativo la caduca forma de medir los tiempos de emisión de publicidad, televenta, patrocinio y telepromoción para ganar más dinero, multas por ofrecer en sus programas una versión de la vida de los famosos (por ejemplo, de Esther Cañadas) mucho más divertida y entretenida, y que, por tanto, consigue más audiencia que la real, que es de lo que va este negocio.

La última injusticia se cometió estos días, cuando el Tribunal Supremo ratificó una multa que obliga a los trabajadores especializados de sus laboratorios de I+D+i (Belén Esteban, Mila Ximénez y Kiko Matamoros) a pagar 120.000 euros a Carmen Lomana por haber creado un nuevo periodismo que da al público lo que quiere. ¿Acaso tienen culpa de que el público quiera que digan "sinvergüenza", "analfabeta", "payasa", "imbécil", "cateta", "idiota", "auténtico perro", "buscavidas", "tonta del culo", "busca camas altas", "cerda", "chupas el culo para que te inviten a fiestas", "de padres cerdos, hijos marranos" y "me lo paso por el potorro"? ¿Al menos no debería Hacienda apoyar a los emprendedores permitiendo que estas multas desgraven?

28/9/15

MI AMIGO DJEHUTY


Os presento a mi nuevo amigo. Se llama Djehuty y nos hicimos amigos en la tele. No es español, claro, pero sufrió una cruel persecución en su país y varios compatriotas de los que me siento orgulloso le han ayudado y protegido. Djehuty llevó una buena vida, pero después todo se torció. Puede pasarle a cualquiera. Menos mal que aunque la política crea fronteras, la ciencia las destruye y por él se desvive un equipo de científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y un montón de especialistas de unas cuantas universidades en colaboración con varias empresas privadas y públicas de diferentes ministerios. ¡Y, de guinda, TVE le dedica todo un programa de una hora a este deslumbrante ejemplo de trabajo en equipo y solidaridad internacional!

Djehuty es egipcio y vivió hace miles de años como escriba real y supervisor del tesoro de la reina Hatshepsut, la primera mujer faraón. Tras su muerte, se les intentó privar del preciado bien de la inmortalidad destruyendo sus nombres y sus rostros de todas partes para condenarlos al olvido. No lo han conseguido y hace ya años que conocemos a este funcionario gracias a las noticias que recogen los medios de comunicación de los maravillosos descubrimientos que constantemente nos regala el Proyecto Djehuty. Ahora podemos ser, además, sus amigos gracias al hermoso y emocionante documental “En busca de Djehuty: entre momias, tumbas y jeroglíficos” que emitió TVE 2 el viernes en “El documental de La 2”. Si no lo vieron y quieren mejorar sus amistades prescindiendo de esas momias de Telecinco que mañana nadie recordará, dense prisa y vean el programa en la web de TVE antes del diez de octubre.

Podía cerrar deseando que proyectos y programas como este proliferen, pero viendo de lo que somos capaces cuando hacemos las cosas bien, seré ambicioso y pediré el mismo celo en la ayuda a otros tantos que, como Djehuty, corren el peligro de ser olvidados… pero todavía están vivos.

27/9/15

LA VENGANZA DE GONZO

Ten cuidado, Wyoming, porque falta el canto de medio pelo para que “El intermedio” deje de ser ese programa de El Gran Wyoming en el que sale Gonzo y empiece a ser ese programa de Gonzo en el que sale El Gran Wyoming. No tiene Gonzo todavía el pellizco inteligente de complicidad con el espectador de Jordi Évole ni tiene tampoco la credibilidad física de Ana Pastor ni la cintura de hábil regateador de Antonio García Ferreras, pero su trabajo es tan sólido, está tan estrictamente bien hecho cumpliendo todos los estándares de calidad del buen periodismo, que vuelve innecesario otro tipo de virtudes más volátiles, más mediáticas y carismáticas. Lleva un buen porrón de años currándose mucho la calle y las tripas de la noticia, y lentamente, sin grandes hitos ni trending topics, se ha convertido en el mejor periodista dentro de su género con el que contamos en nuestro país.

Así que cuidado, Wyoming. Todo alrededor de “El intermedio” es paradójico. El programa nació como un complemento de los informativos tradicionales de la cadena, pero está tan bien hecho que al final el programa humorístico ha terminado comiéndose a los propios telediarios de laSexta. Y la sección de Gonzo nació como un complemento del tono humorístico general de “El intermedio”, pero está tan bien hecha que al final sus reportajes -especialmente en momentos tan críticos como el terrible exilio de los refugiados sirios- han terminado comiéndose a las locuciones de Sandra Sabatés y a las bromas de El Gran Wyoming y Dani Mateo.

Es la venganza de Gonzo. Ha conseguido que el periodismo triunfe como un apéndice de un programa de humor que nació como un apéndice del periodismo. Cada reportaje suyo que emite “El intermedio” lleva como subtexto la tajante necesidad que la sociedad actual tiene del buen reporterismo y su empeño -y el de algunos más- en cumplir esa tarea. Yo que tú, Wyoming, iba pensando alguna pregunta incómoda para Gonzo, por si algún día eres tú el que tienes que hacérsela a él.

26/9/15

"CATALUNYA", EL SPIN OFF


La Asociación de Telespectadores Catalanes emitió ayer viernes un comunicado en donde expresaba finalmente su opinión respecto al procés y a las elecciones plebiscitarias que tendrán lugar mañana domingo en dicha comunidad autónoma. Aprovechando justamente el último día de campaña, la ATC expresó su voluntad de “superar los esquemas caducos de la vieja política”. “Estamos en contra”, continúa el manifiesto, “de la declaración unilateral de independencia, pero tampoco nos encontramos cómodos en el marco de una España federal. Creemos que no basta con importantes reformas constitucionales y no estamos dispuestos a correr el riesgo económico y social de quedar excluidos, o, al menos, de sufrir una situación confusa, de Europa. Por todo ello, los telespectadores catalanes consideramos que la figura legal óptima para Catalunya pasa por ser reconocida como un spin off de España. Es decir, como una nueva serie que se deriva de una serie anterior, en la que un personaje secundario de ésta adquiere protagonismo en aquélla”.

La ATC entiende que las series de televisión proporcionan los esquemas adecuados para superar el atasco de relaciones existentes entre Cataluña y el resto de España. “‘Frasier’ se independizó sin problemas de ‘Cheers’, siguieron conviviendo ambas series en la misma cadena, y su éxito se vio potenciado y no disminuido. Lo mismo ocurrió con ‘Aída’ respecto a ‘Siete vidas’. Más recientemente hemos asistido al nacimiento de ‘Better call Saul’, un spin off de ‘Breaking bad’ que ha sido reconocido como tal por toda la comunidad televisiva internacional”, se señala en el comunicado de la ATC. De la misma manera, si “Catalunya” se considerara un spin off de “España” se solucionarían todas las cuestiones referidas al pago de las pensiones y la nacionalidad de los personajes de la nueva serie. Ningún partido político ha reaccionado todavía a las manifestaciones de la ATC, aunque Mariano Rajoy tras leer el texto preguntó “bueno, ya... pero ¿y la nacionalidad europea?”.

25/9/15

SIN QUE LLORE EL NIÑO JESÚS


Cuando se dice una mentira, el niño Jesús llora. Es algo que sabemos porque Rod y Todd, los hijos marcianos de Ned Flanders, así nos lo enseñan en “Los Simpson”. Así que, de mentiras, nada de nada. Ni siquiera mentirijillas. Otra cosa es no decir la verdad del todo, dar a entender una cosa siendo otra, o levantar expectativas que luego no se cumplen. Porque con esas cosas el niños Jesús no llora. Al menos, los Flanders nunca dijeron nada al respecto. En “Órbita Laika” lo saben. Gracias a ello, el estreno de su segunda temporada (medianoche de los miércoles en La 2) fue un éxito que hizo alguna pequeña trampa, pero sin llegar a hacer llorar al niño Jesús.

La noticia era que en la vuelta de “Órbita Laika” se produciría el esperadísimo reencuentro audiovisual entre dos famosos personajes televisivos que habían marcado una época copresentando “Sé lo que hicisteis”, el programa que dando caña a Telecinco y contraviniendo el principio periodístico que establece que “perro no come perro”, había puesto en el mapa una cadena recién nacida: laSexta. Pero aunque aquello no resultó ser mentira, no era toda la verdad, daba a entender una cosa siendo otra, levantaba falsas expectativas.

En efecto, a pesar de que iniciaba la segunda temporada con Patricia Conde como invitada, anteayer Ángel Martín se limitó a hacer los guiños y chistes que hace siempre con sus invitados para presentar lo que tiene que presentar: un programa de divulgación científica. Entre el cuarto de millón de espectadores que tuvo el programa, los habría que decidieron verlo por ese “esperadísimo reencuentro”, pero con lo que se encontraron fue con cálculo de probabilidades, transgénicos, viajes a la Luna, creación de órganos para trasplantes o el funcionamiento del GPS, entre otras cosas, junto a una cita para repetir la próxima semana. Ya ven: algo infinitamente mejor y sin que llore el niño Jesús.

24/9/15

ESPERANZA DE VIDA ADULTA


Eso de la tasa de mortalidad infantil y la esperanza de vida está mal. La idea es buena, pero se está quedando atrás. La esperanza de vida y la tasa de mortalidad infantil son indicadores que servían para conocer, evaluar y comparar las condiciones de vida de diferentes países, así como su evolución a lo largo del tiempo, pero ya no. Ahí está la penúltima actividad de los concursantes de “Gran hermano” para comprobarlo.

Esta semana varios concursantes adultos que son muy amiguísimos del todo para siempre juntos se levantaron de noche superemocionados de la emoción superfuerte que les invadía y fueron a echar espuma muertos de risa por la cara a otra adulta muy mala que estaba dormida y que se lo merecía por lo mala que era con ellos cuando jugaban al concurso de la tele en el se lo pasan superbién si no fuera porque la mala se porta supermal así que no hagas ruido que no vaya a ser que nos descubra ya verás la cara que pone cuando se despierte llena de espuma es que me desorino vaya risa.

Si alguno de estos adultos muriera, Dios no lo quiera, no variaría la tasa de mortalidad infantil, porque solo recoge las muertes de niños menores de una año y en “GH” solo concursan adultos. Pero, visto lo visto, ¿no habría que rehacer este indicador ampliando el término “infantil” hasta al menos los cuarenta y pico años que tiene la mala de “GH” esta edición? En España, la esperanza de vida crece dos años cada década, pero “GH” muestra que el infantilismo va más rápido, así que habría que crear un nuevo indicador: la esperanza de vida adulta. En él se recogería la cantidad de años que los ciudadanos viven como adultos (ya superado el infantilismo) antes de morirse. Bastaría poner la tele para calcular que en 2095 los españoles tendremos una nula esperanza de vida adulta y un mil por mil de mortalidad infantil de viejitos de 98 años nominándose unos a otros.

23/9/15

NUEVA ZELANDA SIN POCIÓN MÁGICA


La Copa Mundial de Rugby 2015 (Canal + Deportes) que se disputa en Inglaterra (y Gales) es un espectáculo fascinante y completamente diferente a cualquier campeonato de cualquier otro deporte. Por ejemplo, el rugby es un deporte lleno de tradiciones, pero tradiciones buenas, no como la repugnante tradición del Toro de la Vega o la cansina tradición de ofrecer una camiseta con su apellido a Rajoy cada vez que una selección española gana algo. A pesar del peso de la tradición, los partidos de la Copa Mundial de Rugby utilizan la última tecnología para comprobar si el árbitro acertó en su decisión y, si no es así, rectifica y no pasa nada. Parece que fútbol, que huye de la tecnología como de la peste y sólo admite innovaciones casi artesanales como el espray para señalar la barrera en una falta o esos chiripitifláuticos carteles luminosos que o no funcionan, o no se ven o son manejados por el cuarto árbitro con admirable torpeza, necesita de los errores, de las meteduras de pata, de los resultados falsificados por un penalti no pitado o un fuera de juego inexistente. Pero, además, en la Copa Mundial de Rugby pueden jugar Samoa contra Estados Unidos y resulta que la selección exótica es… ¡la de Estados Unidos!

En rugby, la selección favorita siempre es la de Nueva Zelanda, un país que existe más allá de Peter Jackson y “El señor de los anillos”. Antes de cada partido, los jugadores neozelandeses (también los de Samoa, Tonga y Fiji), con uniforme completamente negro, escenifican el Haka, una danza de guerra maorí con la que intimidan al equipo rival,  que es algo parecido al grito de guerra ululante con el que los espartanos avanzaban antes de una batalla, mientras clamaban a Ares. Creo que la Liga de fútbol española, abarrotada de tradiciones grotescas que incluyen el engaño a los árbitros considerado como una de las bellas artes, las celebraciones de los goles insoportablemente pijas o la pérdida continua de tiempo después de cada incidencia, necesita que la selección de Nueva Zelanda se pase por aquí para intimidar un poco a los Ronaldo, Neymar y compañía. Una ración de “All blacks” tendría el mismo efecto en el fútbol que una visita de Astérix y Obélix a un campamento de legionarios romanos. Y sin poción mágica.

22/9/15

JUSTICIA CON EL JUSTICIERO

Al fin se ha hecho justicia con el justiciero. Lo llevaba esperando mucho tiempo. Se le había hecho ya justicia a Spiderman con alguna gran película. Ang Lee supo filmar una obra interesante sobre Hulk. Robert Downey Jr. se ha mimetizado tanto con Iron Man que para las generaciones jóvenes el hombre de hierro es más un personaje de cine que de cómic. Hasta se ha hecho justicia con Los Cuatro Fantásticos -en efecto, sus tres películas, especialmente la última, son espantosamente malas, como corresponde en justicia a los tebeos de Reed Richards y su cuadrilla-. Pero el salto de Daredevil a las pantallas seguía pendiente de una adaptación que supiera potenciar y recrear todas las posibilidades que guarda la vida del diablo sin miedo de Hell’s Kitchen. Hasta ahora.

Porque, en consonancia con el personaje, la (casi) perfecta visión de Daredevil que Drew Goddard ha creado para Netflix basa toda su fuerza en la justicia. La primera temporada de “Daredevil” contiene las dosis justas de oscuridad y de luz, ni una milésima más ni una milésima menos de lo que aprendimos hace décadas leyendo las sagas de Frank Miller. Las dosis justas de tormento y de éxtasis. De maldad y de idealismo. De violencia y de diálogos, ambos escrupulosamente ajustados. Wilson Fisk es justamente como siempre lo imaginamos. La Cocina del Infierno aparece irlandesa, pugilística, católica en su punto justo. Y justamente por el equilibrio exquisito entre la fidelidad a la obra original y su recreación en 2015, el “Daredevil” de Goddard se va a convertir en el referente definitivo del personaje de Matt Murdock y en el modelo que seguirán todas las futuras adaptaciones de historias del cómic a las pantallas domésticas.

El hombre sin miedo vence al crimen cada noche al oeste de Manhattan desde Netflix. Y las series de televisión vencen al cine una vez más, en esta ocasión en un género tan amigo de las pantallas gigantes como el de los superhéroes. Es la justicia que la nueva televisión impone cuando apaga la luz.

21/9/15

EL DEBATE DE MIS SUEÑOS


Yo quiero ver un debate en el que nadie diga a su oponente “no se ponga usted tan nervioso”. O, al menos, que si lo dice, el otro pueda contestarle “es usted el que debería dejar de decir esa sarta de bobadas con tanta tranquilidad”. Si el debate sobre las elecciones catalanas que nos ofreció laSexta el pasado sábado hubiera sido el debate de mis sueños, no sólo Raül Romeva no hubiera usado contra Inés Arrimadas seis, ocho, diez veces el argumento “le veo a usted muy nerviosa”, sino que la barbie Arrimadas le hubiera soltado al insoportable monigote de Junts pel Si “no se ponga usted tan tranquilo teniendo en cuenta lo que nos estamos jugando”.

Yo quiero ver un debate en el que un participante exija hablar “por falta de alusiones”. Si el debate lleva ya transcurriendo un buen rato y uno de los debatientes no está siendo criticado por ninguno de los demás, quiero que pueda dirigirse indignado al moderador, levantar la mano y decir “por no alusiones”. Y que éste asienta y le dé la palabra. Si el debate sobre las elecciones catalanas que nos ofreció laSexta el pasado sábado hubiera sido el debate de mis sueños, Antonio Baños, independentista de izquierdas -que es justo lo contrario de “izquierdista independiente”-, hubiera reclamado varias veces intervenir “por no alusiones”, y la conversación hubiera ganado en frescura y honradez.

Yo quiero ver un debate en el que un participante se dirija a un oponente y le diga airado “haga el favor de interrumpirme, que yo le he interrumpido a usted”. Si el debate sobre las elecciones catalanas que nos ofreció laSexta el pasado sábado hubiera sido el debate de mis sueños, el dicharachero xenófobo García Albiol hubiera interrumpido a todo el mundo tantas veces como de hecho lo hizo, pero al menos después hubiera reclamado ser interrumpido por los demás en cuanto llevara dichas tres palabras seguidas. Al menos de esa manera los espectadores no nos hubiéramos puesto tan nerviosos oyendo todos los asuntos a los que aludía.

20/9/15

EL PRECIO DE FELIPE VI


“El precio de la historia” (Canal Historia) ya no mola. “La mejor parte es que nunca se sabe qué entrará por esa puerta” aseguran en este programa en el que se compra y se vende de todo con tal de que se trate de algo “histórico” (y en Estados Unidos cualquier cosa con más de veinte años lo es). Defraudados, acabamos de comprobar que no siempre es tan fácil.

Esta semana hemos mandado a EE.UU., ese joven país del nuevo continente deslumbrado por la historia, a nuestro rey Felipe, un ejemplar aún en activo de una vieja forma de jefatura de Estado de una vieja dinastía de un viejo país del viejo continente que aún se usa a este lado del Atlántico, pero que por allí no tienen. Nos las prometíamos muy felices imaginando cómo la visita se cerraría con un apretón de manos sobre el mostrador de “El precio de la historia” por el que nos lo compraban, firmábamos unos papeles, se quedaban con él y lo ponían en una vitrina. Pero no ocurrió.

Estuvo muy bien que para propiciar la venta llevaran a Felipe a San Agustín: la más antigua ciudad de Estados Unidos celebra que fue fundada en 1565, hace 450 años, pero mucho antes el rancio linaje del que procede el monarca ya se enseñoreaba de diferentes territorios europeos y vivía parasitando el trabajo de las personas que ocupaban sus dominios y heredades. Eso debería haber hecho que los deslumbrados norteamericanos llamaran a un tasador experto para que inspeccionara a Felipe, comprobara su autenticidad, viera que se encuentra en buen estado, y lo valorara en una pasta gansa. Después vendría el regateo, que se animaría añadiendo toda la familia al lote. Diversión asegurada. Bajaríamos algunos milloncejos para facilitar la venta, y ya está.

Pues no funcionó. En EE.UU. se hicieron muchas fotos y aplaudieron a rabiar, pero nos devolvieron al rey y siguieron viviendo en una república, con lo mala cosa que es eso para un país.

19/9/15

EL TRAIDOR ÁNGEL MARTÍN



Ángel Martín es un infiltrado en TVE, un quintacolumnista en la guerra de las televisiones, un traidor. Lo sabemos gracias al plan astutamente ejecutado por TVE para desenmascararle. Seguramente TVE ya tenía sus sospechas con este humorista y presentador que, tras triunfar con “Sé lo que hicisteis” en laSexta, abandonó inopinadamente el programa y la cadena en la cima del éxito para conformarse con presentar, tiempo después, un pequeño espacio sobre divulgación científica de La 2: “Órbita Laika”. ¿No es extraño buscar este descenso a un programa minoritario sobre un tema minoritario en una cadena minoritaria?

Para saber qué tramaba Ángel  Martín, TVE podía haber hecho caso al refrán aquel de “Si quieres conocer a fulanillo, dale un carguillo”, pero prefirió darle un disgustillo en vez de un carguillo. Y ver qué pasaba. Con este fin, comunicó que la segunda temporada de “Órbita Laika” ya no se emitiría en el horario que todos sus seguidores conocemos de los domingos por la noche, sino que iba a jugar al despiste con todos pasándolo al miércoles. Fue una jugada maestra, Ángel Martín se creyó semejante majadería y mostró públicamente su falta de lealtad a TVE criticándola en Twitter. La emboscada fue tan eficaz que también cayeron otros miembros del equipo del programa como Clara Grima, que se permitió ironizar con el gran éxito de La 1 “En la tuya o en la mía”: “A lo mejor debimos poner a Bertin Osborne de colaborador”, y su creador y director, Jose A. Pérez Ledo, que se pasó de chulo: “Lo malo del nuevo horario de ‘Órbita Laika’ es que así Rajoy jamás se enterará de por qué demonios cae agua del cielo”. Son todos unos traidores.

Eso sí, como después de todo resulte que el cambio de emisión del único programa de ciencia de TVE va en serio, es como para dejar las ironías y mandar a TVE a la mierda por reírse así de todos nosotros.

18/9/15

JUNTOS POR "TU CARA ME SUENA"

Ha llegado el momento de una elección histórica, de crear un nuevo país audiovisual en el que vivir, de tomar las riendas del destino de nuestra televisión. Esta noche, tras muchísimos años de opresión, se puede iniciar un proceso constituyente que nos lleve a una nueva programación. Estamos ante la ocasión de decir adiós a la vieja televisión que nos ha estado maltratando durante demasiado tiempo. Hoy por la noche se juega la madre de todos los prime times. Una guerra de audiencias llamada a acabar para siempre con las guerras de audiencias. Un zapping tan grande que un zapping mayor no puede ser pensado.

Porque hoy Antena 3 estrena en viernes, por primera vez, “Tu cara me suena”, y, también por primera vez, existe la posibilidad real de vencer a “Sálvame” y obligar a que desde Mediaset se escuche alta y clara nuestra voz contra la telebasura. Hoy es el día de la unión de fuerzas, de la apuesta por una audiencia unitaria. Por una noche dejaremos de lado todo lo que nos separa a los que odiamos la apestosa asamblea de “Sálvame” y nos agruparemos alrededor de “Tu cara me suena”. Da igual que tuviéramos pensado ver “La jungla de cristal III” en Cuatro, “Abre los ojos” en La 2 o “Equipo de investigación” en laSexta. El proceso que vamos a poner en marcha exige que abandonemos nuestros gustos sofisticados y hagamos piña sobre una candidatura de consenso histórico.

Es cierto que “Tu cara me suena” no es el programa perfecto con el que todos soñaríamos para la noche de los viernes. Pero una victoria en el prime time del día de hoy obligará a que en Telecinco se sienten a reflexionar sobre lo que ha sucedido, y, frente al inmovilismo y la cerrazón al cambio que han demostrado en los últimos tiempos, quizá entiendan que ha llegado el tiempo de superar la nefasta etapa de Jorge Javier Vázquez y su banda de truhanes. Un proceso que nos conducirá hasta una televisión más justa, sin corrupción, económicamente próspera. Comenzará esta noche. La audiencia de nuestras vidas. Todos juntos por “Tu cara me suena”.

17/9/15

LA ORINA DE PABLO MOTOS


Lo cuenta Claude Bernard: un médico francés de comienzos del siglo XX investigaba la orina humana, y en su intento por conocer sus características generales tomaba muestras de los depósitos de un urinario público situado en una concurrida estación de tren parisina por donde pasaban gentes de toda condición, países y edades. De esa forma, entendía el doctor, obtendría una orina media, representativa de los europeos, sobre la que comenzar a realizar sus trabajos. El estudio, obviamente, fue un fracaso. Esa orina que intentaba identificar a todo un continente no representaba a nadie. Algo parecido hizo Michael Jackson cuando intentó ser un término medio entre hombre y mujer, entre adulto y niño, entre blanco, negro y amarillo. El resultado no fue una persona especialmente representativa de la especie humana; el resultado fue un monstruo.

No se puede complacer a todo el mundo. No se puede intentar abarcarlo todo a la vez. O, mejor dicho, sólo Pablo Motos puede intentar complacer a todo el mundo y salir airoso del intento. Porque el éxito innegable de “El hormiguero” parece basarse en ampliar el target a lo bestia. En la época de los canales temáticos y los programas identitarios de grupo, ha conseguido ser a la vez un programa infantil y un programa adulto, un programa femenino y un programa masculino, un programa de humor y un programa serio. Todo el mundo pronosticaría su fracaso y anteayer celebró su décimo cumpleaños con los mayores niveles de audiencia de su historia.

Claro que, a lo mejor, no es nada de esto. A lo mejor “El hormiguero” es un programa clásico de género infantil y es la audiencia global -niños, adultos, mujeres y hombres y viceversa- la que se iguala en su infantilismo cuando se sienta a ver la tele después de cenar. Mientras tanto y por si acaso, algún médico francés debería tomar una muestra de la orina de Pablo Motos por si resulta ser especialmente representativa de la orina media europea. Además, es obvio, que con tanto gimnasio, tanta pastilla y tanta tontería está empezando a parecerse a Michael Jackson.

16/9/15

DIOS SE ENFADA CON MARIO



Con motivo del estreno de la cuarta temporada de “Alaska y Mario” (MTV), Mario Vaquerizo abrió la boca y expulsó sonidos que formaron palabras que pasan a formar parte inmediatamente de la cultura popular. Las sentencias de Mario Vaquerizo deben ser tomadas muy en serio porque en los bares de barrio y en las cafeterías de los institutos y facultades no se habla tanto de Bauman o de Zizek como de Alaska y Mario. Y Mario abrió la boca y dijo…
 
1. “En `Alaska y Mario´ no hay personajes, hay personas. Personas con personalidad”. La Psicología tiene a partir de ahora el reto de asimilar las profundas implicaciones de esta revelación. Pero las personas sin personalidad pueden sentirse ofendidas.
 
2. “Yo, mientras no me canse de mí mismo, me da igual lo que piense la gente”. La Filosofía tiene a partir de ahora el reto de incorporar esta sentencia vaqueriziana al famoso “Conócete a ti mismo”, que pasaría a formularse más o menos así: “Conócete a ti mismo pero sin que llegues a cansarte de ti mismo”. Pero Sócrates puede sentirse ofendido.
 
3. Nosotros venimos de Andy Warhol, y si Warhol estuviera vivo tendría el mejor “reality”, y se llevaría fenomenal con Tamara Falcó, con Yola Berrocal, con Kim Kardashian…”. El Arte tiene a partir de ahora el reto de establecer la línea que conduce de Warhol a Kardashian y a los “reality”. Pero Mercedes Milá puede sentirse ofendida.
 
4. “Alaska aporta sentido común a la televisión”. La Sociología tiene a partir ahora el reto de redefinir el “sentido común”. Pero Mariano Rajoy, que tanto habla del sentido común y de la gente “normal”, puede sentirse ofendido.
 
5. “Soy muy inculto en muchas cosas. Pero yo para qué quiero saber los ríos. Creo que la cultura no está en saber dónde está el Tajo”. La Geografía tiene a partir de ahora el reto de reciclarse para que Sheldon Cooper no la añada a su lista de ciencias no reales. Pero los afectados por el trasvase Tajo-Segura pueden sentirse ofendidos.
 
6. “Nosotros no aportamos nada a la tele, sólo omnipresencia”. No sé qué tendrá que decir la Teología acerca de esto, pero estoy seguro de que Dios está muy, muy, muy, pero que muy enfadado con Mario.

15/9/15

POTAJE "GRAN HERMANO"


La crítica televisiva de hoy es cantada. Solo hay que acompañar al sin par Julián Hernández cuando en el disco “Made in Japan” (grabado en Memphis, Estados Unidos: ¡viva Siniestro Total!) decía: “Sin novedad en el potaje, comandante; sin novedad en el potaje, coronel; hoy el rancho es el mismo de siempre, así que no hay nada que comer”. No sé qué bola de cristal consultó el visionario Hernández para escribir esto, pero antes de que existiera “Gran hermano” resumió en dos líneas los estrenos de todas las ediciones de este reality show una vez superada la novedad que supuso su aparición hace tres lustros. Porque el arranque de la edición 16 (¡socorro, mátenme!) que hizo el domingo por la noche Telecinco volvió a consistir en el mismo narcisismo de siempre en el que sigue sin haber nada que comer.

Se ve que en una reunión de jefazos decidieron volver a presentar el potaje de la nueva edición como algo diferente elaborado con nuevos ingredientes, pero no cuela. Da igual que lleven un mes contando novedades, da igual que tiren la casa y la construyan de cero, da igual que se deshagan de los viejos participantes y hayan comprado otros nuevos, da igual que reformen el logo, da igual que reformulen las reglas, da igual que lo que antes ocurría en “GH” fuera superfuerte por un motivo y ahora lo sea por otro, da igual que los niñatos y niñatas del concurso jueguen al a que te pillo, a las mentirijillas, a la gallinita ciega, a los papás o al quieres casarte conmigo, da igual incluso que Mercedes Milá caiga en éxtasis místico viendo “Cámbiame” y dé un vuelco radical a la civilización occidental cambiándose el peinado. Al final, no hubo novedad en el potaje que sirvieron a la audiencia.

“Para los vegetarianos hoy hay carne de cañón”, añade Hernández en aquella canción de Siniestro Total. En esto, la comandante coronela Milá se comportó con más generosidad: en el rancho de “GH” hay carne de cañón para todos.

14/9/15

LA TELE QUE AMO


La tele pública que amo es la tele de Rafael S. Avello. Avello trabajó durante años en el Centro Territorial de TVE en Asturias y siempre le gustó que sus informativos se despidieran indicando a la audiencia (a los dueños de la empresa) que la información continuaba cada hora en Radio Nacional (que también es parte de la misma empresa). De él aprendí y por eso la tele pública que amo no es ni La 1, ni La 2, ni ninguno de los muchos canales de TVE porque la tele pública que amo es más que la tele pública entera. La tele pública que amo es toda RTVE, que suma a sus canales de televisión todos sus canales de radio trabajando juntos (lo que incluye, por supuesto, la desconcertante Radio 6 de Juan Carlos Ortega con la que conecta Pepa Fernández en “No es un día cualquiera”).

La RTVE que amo estrena la cuidada e interesante serie “Carlos, Rey Emperador” como hizo el pasado lunes por la noche La 1. La RTVE que amo reemite el capítulo “Carlos V, un monarca, un imperio y una espada” del documental “Memoria de España” como hizo justo al día siguiente por la mañana La 2. La RTVE que amo entrevista al historiador Antonio-Miguel Bernal para que nos explique la figura del emperador Carlos en el programa “La Historia de cada día” el sábado pasado por la mañana. En la RTVE que amo todos los recursos disponibles colaboran para captar nuestro interés y ofrecernos un mejor servicio público, lo que incluye la cooperación con un sistema educativo con el que la sociedad pretende despertar el interés de los jóvenes por el conocimiento y por ser mejores ciudadanos.

Ya solo faltaba que RTVE no solo usara, como usa, los programas y canales menores para promocionar los productos de relumbrón de La 1, sino que también aprovechara, como no aprovecha, los productos de relumbrón de La 1 para potenciar y dar a conocer otros programas y canales menores en audiencia pero que dan a la tele pública su auténtica razón de ser.

13/9/15

PLUMAS DE GALLINA


En 1507 John Damian de Falcuis estaba en serios problemas. El rey Jaime IV de Escocia estaba empezando a cansarse de sus promesas incumplidas de encontrar la piedra filosofal. Aunque era el alquimista oficial de Su Majestad, sus intentos de obtener oro a partir de metales vulgares fracasaban una y otra vez, por lo que Damian intentó agradar al rey haciéndole una promesa igualmente sorprendente: encontraría la forma de que los hombres volasen. Para ello construyó unas alas hechas a base de plumas de ave y aseguró que volaría desde el castillo de Stirling hasta Francia. Se subió a las murallas del castillo, saltó desde ellas provisto de dichas alas y obviamente cayó como una piedra inmediatamente. Tuvo la inmensa suerte de romperse únicamente una pierna y cuando el rey le pidió cuentas de su nuevo fracaso, Damian atribuyó su caída a que había utilizado plumas de gallina para la construcción de sus alas, que es un ave que no vuela. Costó trabajo que el alquimista no lo volviera a intentar con plumas de águila.

Pero Televisión Española sí vuelve a intentarlo. Una y otra vez. Creó un programa rancio y revenido como “Jugamos en casa” con Los Morancos y lo lanzó desde lo alto de las murallas. Cayó a plomo contra el suelo. “Claro, es que la hora no era la adecuada”, se dijo, y creó un programa rancio y revenido como “La alfombra roja” con José Luis Moreno. Nueva pierna rota.  “Claro, es que el día no era el adecuado”, se dijo, y creó un programa rancio y revenido como “Así de claro” con Sáenz de Buruaga que igualmente se rompió la crisma contra el fondo de la audiencia. Pero sigue sin entender que sus programas no funcionan porque son rancios y revenidos. Sigue intentando llegar volando hasta Francia con plumas de aves. Intentando complacer al rey, acaba de construirse unas nuevas alas a base de un programa rancio y revenido de entrevistas con Bertín Osborne. Se sube a la muralla más alta del castillo de Stirling. Se lanza al vacío...

12/9/15

DIOS Y LA CURSILERÍA


Tradicionalmente los países obtenían su fuerza gracias a tener a Dios de su lado. En la actualidad los nuevos países han cambiado a Dios por un aliado mucho más potente: la cursilería. En el fondo, Dios y la cursilería se parecen mucho. Todo es vanidad y, paradójicamente, quizá nada sea más vanidoso que las creencias religiosas y el pésimo mal gusto de los cursis. O el pésimo mal gusto de las religiones y las creencias cursis. Detrás del mal siempre hay un hortera, y detrás de las campañas electorales siempre hay un batallón de publicistas. Tradicionalmente invocaban a Dios para defender sus posturas; ahora aseguran tener la cursilería de su lado.

Basta ver el anuncio televisivo central de la campaña electoral de Junts Pel Sí para entender por qué van a ganar las próximas elecciones autonómicas. Niños en el ochenta por ciento de los planos, enamorados que se miran, musiquita amorosa. ¿Es un anuncio de compresas, de refrescos, de una nueva tarifa de alguna empresa de telefonía móvil? No, es el anuncio de la secesión de la parte más rica del territorio español, harta de que el carácter redistributivo de los impuestos les obligue a dar más de lo que reciben. ¿Quién puede ser el desalmado que esté en contra de algo nuevo que ha conseguido que Lluis Llach y Artur Mas compartan secuencia?

De entre todas las trampas de la publicidad europea en lo que llevamos de siglo, ninguna más brillante, más invencible y genial que la de presentar bajo la palabra “juntos” a aquéllos cuyo principal objetivo es separarse. Que “Junts pel sí” haya conseguido arrebatar la palabra “juntos” a los que pretenden que sigamos juntos y la palabra “sí” a los que defienden continuar con la situación actual supone el escamoteo de sombras más lúcido de la política nacional desde que a alguien se le ocurrió el nombre de “Partido Popular”. Como dijo una chica sonriente en la última “La sexta noche”: “¿sabe por qué vamos a vencer? Porque tenemos la ilusión de nuestro lado”. Y tenía razón. Tienen la ilusión, Dios y la cursilería. Apestan. Van a arrasar.

11/9/15

A POR BERTÍN OSBORNE

Risto Mejide no va de chulo, sobrao, ni prepotente. No hay más que compararlo con lo que hizo Bertín Osborne en el estreno de “En la tuya o en la mía” el miércoles por la noche en La 1, un programa de entrevistas con un coste prudente (que no se hace público) que TVE encargó a Bertín por sus indiscutibles méritos (que muchos discuten) gracias a que en un concurso-oposición realizado con la máxima transparencia (del que nadie tiene noticia) demostró a un jurado independiente (en paradero desconocido) que para realizar entrevistas posee la cualificación adecuada (que se ignora) gracias tanto a su amplia preparación académica (nula) como a su currículum laboral (que, esta vez sí, todos conocemos, pero nuestra vida sería mejor si no fuera así).

Risto es, en efecto, un tipo comedido y prudente que solo utilizaba a los invitados entrevistados en “Viajando con Chester” o “Al rincón de pensar” como pretexto para lucirse y demostrar que él es el más mejor de lo mucho bueno en el mundo universal del universo mundial. Bertín superó eso y no se limitó a utilizar a su entrevistado Pablo Alborán para contarnos lo guay que es él, sino que también enseñó lo guay que es el salón, la cocina y los jardines de la casa que tiene él, la mujer del salón de la cocina de los jardines casa que tiene él y los hijos del salón de la casa de la mujer del salón de los jardines que tiene él con él y de él. Humildemente, claro, porque todo esto lo hace para que nos ahorremos tener que comprar el “¡Hola!” para ver los publirreportajes fotográficos “Bertín nos enseña su casa”, “Bertín nos enseña a su mujer” y “Bertín nos enseña a su familia” y “Bertín nos enseña a Bertín”. Una pasta.

Puede que “En la tuya o en la mía” dure más en antena de lo que duró “La alfombra roja palace”, aquel fiasco de José Luis Moreno para TVE. Por si no es así, habrá que espabilarse para que dé tiempo a darle su merecido. Allá vamos.

10/9/15

ALFABETIZACIÓN AUDIOVISUAL


Felicidades a TVE. Tuvo la genial idea de celebrar el Día Internacional de la Alfabetización, que cada año se conmemora el ocho de septiembre, de una forma original y divertida: estrenando una buena serie de ficción que se llevara por delante la birria de programa, el que fuera, que ese día emitiera Telecinco. Y les salió redondo. El estreno de “Olmos y Robles” triunfó y “Cámbiame Premium”, la birria que Telecinco emitía anteayer, sufrió en sus índices de audiencia el éxito de la nueva serie.

Hay que felicitar a TVE por una serie que se deja ver con gusto. La trama es entretenida, los gags son divertidos y los detalles están cuidados: es uno de esos programas que no dan vergüenza ajena, de los que no te arrepientes de haber quedado viendo la tele en vez de ir a la cama, y del que se puede hablar al día siguiente sin ponerte colorado por las cosas que ves en la tele. Algo que no puede decirse de “Cámbiame premium”, que trata a los espectadores como si fuéramos tontos capaces de dedicar una noche a la semana a la idiotizante actividad de ver cómo unos señores van al peluquero o unas señoras cambian los muebles del salón.

Porque, en efecto, la alfabetización audiovisual también tiene su importancia, y el ascenso de “Olmos y Robles” y la caída de “Cámbiame premium” es algo más que el triunfo o el fracaso de un programa en la tele. TVE solo cometió un fallo: tanto afán para que la celebración del Día Internacional de la Alfabetización saliera bien les llevó a emitir una promo de presentación de los dos personajes protagonistas descorazonadora: salía primero el agente Robles comportándose como un experto en combate en una lucha cuerpo a cuerpo ¡y sobreimpresionaban el cartelito “Experto en combate”!, salía después el agente Olmos comportándose torpemente en una situación social ¡y sobreimpresionaban el cartelito “Torpe”! Vale, lo pillamos, pero los siguientes promos con más nivel, porfa, que primero de “Alfabetización audiovisual” lo tenemos todos aprobado.

9/9/15

LAS PALABRAS Y LAS COSAS


Hay muchas diferencias entre “Juego de tronos” y “Carlos, Rey Emperador” (La 1): en “Juego de tronos” hay más sangre, mucho más sexo, muchísima más acción, decorados más espectaculares, dragones enormes y una filosofía política de laboratorio de la que es fácil extraer complejas conclusiones. La nueva serie de la televisión pública protagonizada por Carlos I de España y V del Sacro Imperio Romano Germánico da la sangre por entendida, ofrece algunas gotas se sexo para todos los públicos, no está sometida a la acción por la acción, utiliza los decorados como fondo y no como figura, no necesita dragones y se sostiene en un complejo equilibrio entre el peso de la historia y la fragilidad humana que engancha a los espectadores desde el desembarco de Carlos en Tazones. Y aquí está la gran diferencia entre estas dos estupendas series: en “Carlos, Rey Emperador” no hay que esperar a la próxima semana para saber qué pasó con Carlos y su hermano Fernando porque no dependemos de la imaginación de George R. R. Martin ni de los guionistas, sino que basta con abrir un libro de historia. “Carlos, Rey Emperador” no es “Juego de tronos” en el siglo XVI porque, entre otras cosas, en la historia bien contada no hay pecado de “spoiler” y nadie se puede molestar si destripo el final de la serie diciendo que Carlos abdica y se retira al monasterio de Yuste.

A algunos les habría gustado que “Carlos, Rey Emperador” tuviera más acción en su primer capítulo, pero creo que no debemos confundir “acción” con coreografías llenas de espadones y rostros sudorosos. La auténtica acción son las palabras, y hay más acción en las reflexiones del cardenal Cisneros o en los planes del gobernador de Cuba que en la célebre “Boda roja” de “Juego de tronos”. En “Carlos, Rey Emperador” son más importantes las palabras que las cosas, así que lo que dice Adriano de Utrecht o Germana de Foix está por encima de las cosas que vemos en las sangrientas bodas de “Juego de tronos” o en las maravillosas aventuras del Capitán Trueno. Palabras y… ¡Acción!

8/9/15

LA MIRADA PIXELADA

Y de pronto lo vi claro: era la primera vez en la historia del periodismo mundial que se pixelaba una cara no para proteger la identidad de la persona que aparecía en la foto sino para proteger la sensibilidad de los espectadores. Muchas vueltas le había estado dando durante esos últimos días al hecho de que la cara del niño sirio muerto en la playa turca apareciera pixelada en todos los medios de comunicación, y fue durante “La sexta noche” de este pasado sábado cuando me di cuenta de que lo que parecía ser una práctica periodística movida por el respeto al niño era en verdad una prevención tomada por las cadenas para que la imagen no resultara demasiado aterradora para los televidentes. ¿Defender el derecho a la privacidad del niño? Pero si se está diciendo todo el rato su nombre y apellidos, se entrevista al padre, se muestran fotos sin pixelar de Aylan Kurdi antes de la tragedia... ¿De verdad preocupa su derecho a la intimidad a una sociedad que le niega el derecho a salvar la vida? ¿Se teme... no sé... que el niño quede marcado por la foto, que en el futuro sufra las consecuencias del estigma social por haber protagonizado este episodio? Es todo demasiado macabro. Es todo demasiado hipócrita.

La cara es lo que convierte a un cuerpo humano en una persona. Mientras no veamos la cara muerta de Aylan la imagen seguirá teniendo una tranquilizadora aureola de irrealidad. No pixelaron la cara del niño, sino la forma en cómo los espectadores íbamos a verla. Nos pixelaron la mirada y al hacerlo crearon la alegoría más tétrica y reveladora de los últimos tiempos sobre los medios de comunicación. Esa capacidad para mostrarnos el horror, y al mismo tiempo distanciarnos de él y atenuarlo. La habilidad para poner un zoom de cientos de megapíxels sobre lo accesorio y ofrecernos lo fundamental desenfocado y borroso. Nos ofrecen la realidad a cuadritos: fingen que lo hacen por los principios éticos de sus profesionales cuando en realidad lo único que les mueve son los requisitos estéticos de sus espectadores.

7/9/15

QUE CONTINÚE LA EVOLUCIÓN


El cambio de empresa de Buenafuente, de Atresmedia a Movistar+, no supone un mero cambio de cadena para emitir sus programas: es un cambio total de las reglas del juego. La clave no está en que vayamos a ver un logotipo u otro en la base de la pantalla mientras escuchamos a Andreu contar sus historias. Pasar de la televisión generalista a la televisión de pago supone liberarse de la absurda dictadura de las audiencias diarias y someterse a otro tipo de evaluaciones mucho más razonables para productos televisivos dignos como los que acostumbra a realizar El Terrat. Y si cambian las reglas de supervivencia cambian por completo las morfologías de los organismos.

La llamada “edad de oro de las series”, ésa que ha llenado nuestra vida de maravillas como “Los Soprano” o “Homeland”, sólo fue posible gracias a que las televisiones de pago norteamericanas están libres del cortoplacismo de los shares de cada mañana y evalúan sus emisiones semestralmente a la vista del aumento o el descenso de los abonados. Si la emisión del capítulo 2 de la primera temporada de “The wire” hubiera dependido de la audiencia del capítulo 1, la serie de David Simon jamás hubiera terminado su primera temporada o, más probablemente y peor aún, hubiera terminado convirtiéndose en una serie banal, efectista y sensacionalista, única estrategia de supervivencia en el ecosistema de las evaluaciones diarias. Para que Walter White pudiera completar su proceso de malignización en toda su complejidad hizo falta que la AMC juzgara los gustos de la audiencia tras cada temporada y no tras cada capítulo. Si cambia la temporización de la evaluación cambia por completo la televisión que resulta de ella.

Y Movistar+ en este momento ofrece una lógica de trabajo mucho más adecuada que la televisión generalista para un cómico brillante como Andreu Buenafuente. Tenemos al animal adecuado en el nicho ecológico adecuado. Tras unos años de estancamiento ha llegado el momento de que continúe la evolución del late night en nuestro país de la mano de su presentador más inteligente.

6/9/15

MALDITA ESCUELA



Qué ilusión para los niños españoles. El fin de las vacaciones es triste para todos, pero septiembre marca el inicio de un nuevo curso que llena su corazón infantil, aún no endurecido por los sinsabores de la vida adulta, de esperanza y ánimo para enfrentarse a los retos que tendrán que superar. Con renovado impulso se disponen a medir sus fuerzas y crecer ante las dificultades, a pisar con paso firme por caminos antes desconocidos, a consolidar los cimientos sobre los que construirán su futuro, a conocer nuevas personas y nuevos escenarios que exigirán de ellos lo mejor y obligarán a niños y niñas a que se esfuercen al máximo para convertirse en las personitas que la sociedad espera y necesita. Porque, sí amiguitos, ¡por fin llega a Telecinco “La voz kids 2”!

Gracias a “La voz kids 2” los peques podrán salir en la tele para ser famosos como los famosos de verdad, y no solo en su cole o en su pueblo, sino en toda España, ¡con lo importante que es ser famoso! En este educativo concurso se les enseña a competir unos con otros sabiendo que no basta con esforzarse y trabajar porque hay que ser mejor que los demás si se quiere triunfar, que solo uno puede ser el ganador y los demás son unos perdedores por mucho que los envuelvan en palabrería para templar gaitas, que si se quiere triunfar hay que estar dispuesto a hacer lo que te manden, en este caso en Telecinco. Grandes enseñanzas para la vida que no solo recibirán los concursantes, sino todos los niños españoles con solo quedarse a ver la tele hasta las tantas. Esperemos que sus padres sean comprensivos y les permitan trasnochar demostrando que quieren lo mejor para sus hijos.

Lo malo es que, a la vez de “La voz kids 2”, también empiezan las clases en la escuela, los madrugones, los estudios, el trabajo diario sin que David Bisbal te diga lo guay que eres, sin focos, sin aplausos, sin fama, sin que te reconozcan por la calle. Qué fastidio.

5/9/15

UN TIEMPO NUEVO - REBOOT

Mi principal objeción al nuevo “Un tiempo nuevo” es que no le veo la menor conexión con el antiguo “Un tiempo nuevo” que justifique mantener el mismo título. Repasemos las diferencias: el antiguo UTN se emitía en Telecinco, el nuevo UTN se emite en Cuatro; el antiguo UTN era presentado por Sandra Barneda, el nuevo UTN es presentado por Silvia Intxaurrondo; el antiguo UTN estaba producido por Producciones Mandarina, el nuevo UTN está producido por Cuarzo Producciones. Ha cambiado por completo el plató, todos los colaboradores y tertulianos, los reporteros, el diseño gráfico del programa, la sintonía. Ha cambiado el director, el regidor, el maquillador, el técnico de sonido, el iluminador. Ha cambiado la empresa que sirve el catering,  los cortes de publicidad, las moscas que revolotean alrededor de los focos, los señores y señoras de la limpieza, los reponedores de las máquinas de refrescos y cafés. Ha cambiado, sobre todo, la calidad del programa; mucho, muchísimo, y para mejor. ¿Por qué se empeña Mediaset en presentar la primera entrega del nuevo programa de Cuatro como la trigésimo quinta entrega del antiguo programa de Telecinco?

Se denomina con el término “reboot” al reinicio de una serie de ficción dado el agotamiento o el fracaso de las entregas anteriores. El reboot recrea por completo el universo de dichos personajes, vuelve a contar sus orígenes cambiando elementos fundamentales, resetea una trama que ya no daba más de sí buscando nuevos impulsos desde los que relanzarse. Hasta ahora los reboots eran exclusivos de la ficción y la ciencia ficción, -Godzilla, Spiderman, los 4 Fantásticos...-, pero Mediaset ha conseguido realizar un crossover entre  géneros y ofrecernos el primer reboot de un debate político en la historia de la televisión. Hoy por la noche, “Un tiempo nuevo - Reboot”, segunda entrega. Con Silvia Intxaurrondo sustituyendo a Sandra Barneda, igual que Daniel Craig sustituyó a Pierce Brosnan en el reboot de James Bond.

4/9/15

EL NIÑO MUERTO Y PIXELADO


La discusión no debería ser sobre si las televisiones deben emitir o no la foto del niño muerto en la playa turca. La discusión debería ser sobre si las televisiones deben emitir o no alguna otra cosa diferente a la foto del niño muerto en la playa turca mientras no se resuelva el drama de los refugiados sirios. No tiene mucho sentido cuestionarse la moralidad de ofrecer a los espectadores la imagen de un niño de tres años tendido muerto sobre la arena. Lo que tendría sentido sería cuestionarse la moralidad de ofrecer a los espectadores “El hormiguero”, “Mujeres y hombres y viceversa” o “Batman begins” mientras la marea lleva hasta la orilla en Turquía el cadáver de  gente que huyó del horror en que se ha convertido su tierra natal y halló todo tipo de dificultades para encontrar otro lugar en donde le permitieran llevar una vida normal. Eso es lo que toca hacer aquí y ahora, en Europa a comienzos de septiembre de 2015, ante la mayor crisis humanitaria en Oriente Medio de las últimas décadas: deberíamos exigir tuits sobre la responsabilidad de los periodistas que van a cubrir el nuevo avatar de Isabel Pantoja en la cárcel, intervenciones en los debates televisivos en las que los responsables de las cadenas justifican la postura de su cadena ante la emisión de un nuevo capítulo de “El secreto de Puente Viejo” el día que se conoció otra oleada de muertes en el Mediterráneo.

Vienen escapando de un infierno de violencia, religión y pobreza, y se encuentran con muros y cuchillas que les impiden llegar a ponerse a salvo. Pixelamos la cara del niño sirio cuando aparece muerto sobre nuestras playas porque, aunque se le prohíba entrar en nuestros países, seguimos demostrándole respeto y defendiendo su derecho a la privacidad como si fuera la hija de Belén Esteban y Jesulín de Ubrique. Y su drama nos da ocasión para tener un interesantísimo debate sobre los límites del morbo en el periodismo actual, que se emite, eso sí, justo entre “Zapeando” y “Cazamariposas VIP”.

3/9/15

CÁMBIAME POSTVACACIONAL


Eso sí que no. No puede ser que Telecinco estrene “Cámbiame premium” justo el uno de septiembre. Ese día los ciudadanos occidentales de bien andamos ocupados autoobservándonos con detenimiento en búsqueda de esos síntomas que permitirán a un médico diagnosticarnos un hermoso síndrome postvacacional con el que poder presumir ante nuestras amistades porque nuestras vacaciones fueron mejores que las suyas. Pero con el estreno de un programa tan perverso, manipulador y tramposo como “Cámbiame premium” no hay manera de recopilar síntomas como Dios manda.

En efecto, basta con haber pasado unos minutos por el nuevo programa de Jorge Javier Vázquez para quedarse sin síndrome postvacacional. Es suficiente haberle echado un vistazo anteayer por la noche a “Cámbiame premium” en un zapping (no quiero ni pensar en quien lo haya tragado entero) para sufrir irritabilidad, ansiedad, sueño, hastío, falta de concentración y una sensación de vacío equiparable a la depresión, ¡justo los síntomas de nuestro adorado síndrome! ¿Cómo conseguir ahora que le haga caso un médico y ponga por escrito que puede seguir unos días más sin ir a trabajar porque está malito? El médico sabe que la irritabilidad y el hastío pueden deberse a haber visto cómo manipularon a una señora para llevarla al plató aunque ella había dicho mil veces que no quería salir en la tele, que ver a Fortu disfrazado de Manolo Escobar produce ansiedad y hastío, que comprobar cómo un alcalde pone un pueblo al servicio de la telebasura ocasiona sueño y una sensación de vacío equiparable a la depresión.

Que aprenda Telecinco de La 1, que dedicó la noche del martes uno de septiembre a darnos ánimos despidiendo esa pesadilla de “Cocineros al volante” y reserva el estreno del nuevo programa pesadilla de Bertín Osborne para dentro de una semana, cuando haya pasado todo y nos hayamos hecho a la idea de que esto no tiene arreglo.

2/9/15

VIVA EL SEÑOR DIRECTOR


Hablando de la próxima temporada televisiva, el director de TVE, José Ramón Díez ha dicho que La 1 continuará emitiendo “Corazón” para cerrar sus mañanitas (bueno, lo de “mañanitas” es cosa mía: es que no solo vuelve Mariló Montero, además la ascienden a directora adjunta de “La Mañana de La 1”). Díez remata diciendo que, con 18 años de emisión ininterrumpida, “Corazón” es “el programa más antiguo de la televisión”. ¿El programa más qué?

“Corazón” comenzó a emitirse en julio de 1997, y, desde luego, hay programas más antiguos. A no ser que Díez no considere “programa” el “Telediario” que desde 1957 emite TVE. Esto sería posible si sacáramos de la categoría de “programa” a los informativos, lo que, de paso, arreglaría el problema que plantea “Informe semanal”, en antena desde 1973; junto a “La 2 noticias” y “Los desayunos de TVE”, que TVE emite desde 1994. El mismo truco habría que hacer con los documentales y reportajes: si no se los considera “programas”  se puede uno deshacer de “En portada” (estrenado en 1984) y de “Documentos TV” (de la quinta de 1986). “Cine de barrio” ameniza y amenaza nuestras vidas desde 1995, pero podría eliminarse diciendo que no es un programa “antiguo”, sino “arcaico”, a ver si cuela. Pero nada de esto serviría con el incombustible Jordi Hurtado, que ya estaba al frente de “Saber y ganar” antes de que Anne Igartiburu dijera por primera vez “Hola, corazones” con ese estilo tan personal y cargante.

A no ser que estemos especulando sin motivo sobre unas palabras dichas por un director de TVE que es un cachondo bromista. Cuando anteayer se le preguntó por qué TVE no emitió este año, tal y como él anunció, la continuación (ya grabada hace años) de la exitosa serie “14 de abril. La República” estrenada en 2011, Díez dijo que aquellas palabras habían sido una broma. ¡Una broma! Pues ya está: estas también. Viva el señor director y asunto arreglado.

1/9/15

TÚ A "ZOOM TENDENCIAS", YO A CALIFORNIA



Hoy recomiendo un programa al que no se presta la atención que merece: “Zoom tendencias”. Es cierto que es un espacio insufrible, pretencioso y elitista debido a que trata asuntos elitistas, pretenciosos e insufribles de un modo insufrible, elitista y pretencioso; pero hay que reconocerle que no suscita en el espectador la reacción de huida automática que provocan otros programas inaguantables. Cuando uno se tropieza con “Zoom tendencias” en La 2 apetece mirarlo detenidamente y demorarse durante un minutazo o dos antes de mandarlo al guano haciendo zapping. De este modo, gracias a esos instantes que uno espiga aquí y allá, y que atesora en su corazoncito, va sabiendo cuáles son las tendencias que marca la más rabiosa actualidad de la gente guapa que está a la última y sigue la moda de lo más de lo más. Y así, ¡oh, placer de dioses!, sabiendo todo eso, uno puede ponerse sibarita y darse el gustazo de darle un corte de mangas y hacer exactamente lo contrario.

Porque “Zoom tendencias” tiene un nombre pintiparado para su propósito: poner el foco en cada detalle de todas aquellas pijoterías sobrevaloradas de las que uno tiende a huir como alma que lleva el diablo. ¿Que “Zoom tendencias” visita una ciudad? Muy bien, pues veamos qué lugares están de moda para no ir por allí ni a tiros. ¿Que salimos de fin de semana? Estupendo, pues conozcamos ese hotelito tan cuqui del que nos habla el heredero que transformó a capricho uno de los palacios familiares siguiendo los consejos de su esposa aficionada a la decoración y el interiorismo para buscar alojamiento en otro sitio. ¿Que vamos a cenar o de vinos o de vacaciones? Vale, pues huyamos de estos restaurantes, estas bodegas y estos destinos. Es fácil saber cuáles. Basta tener la tendencia a escapar de “Zoom tendencias”.