1/3/19

LA VERDAD ES LA VERDAD



Dicen los de Yale (Connecticut, universitarios de Connecticut) que la frase del año en 2018 es del exalcalde de Nueva York, Rudy Giuliani. Intentando defender a Donald Trump de la investigación de la “Trama Rusa”, carga a saco cuando un periodista le acorrala.
La verdad es la verdad.
—No, no es la verdad. La verdad no es la verdad.

Eso aquí no pasa. Pablo Casado, por ejemplo, no dijo en la entrevista televisiva del pasado lunes en La 1 que un maltratador no es un maltratador. Simplemente cambió la palabrota por el eufemismo “Esa persona que no se está portando bien” con las mujeres. Es como el clásico “Esa persona de la que usted me habla” y su secuela de La 2 “Ese programa del que usted me habla”. Queda mucho más fino, no ofende a esas personas que no se están portando bien con las mujeres, y no molesta a ese partido político aliado que se está portando bien con esas personas que no se están portando bien con las mujeres. Eso sí, a una pregunta del entrevistador, Carlos Franganillo, Casado le arreó un buen zasca.
—Usted decía recientemente al digital ‘El Español’ que algunas mujeres en momentos de incertidumbre podían no saber qué tenían dentro. ¿Piensa que algunas mujeres en esos casos no lo saben y que el Estado tiene que intervenir de alguna manera?
—Yo lo que creo es que hay que leerse las entrevistas enteras. Lo que decía es que tenemos que tener información en este tipo de cuestiones; cuanta más información, mejor.

Al día siguiente, Xabier Fortes recuperó en “Los desayunos de TVE” la grabación de lo que había dicho Casado sobre el aborto en aquella entrevista. Y parece que Franganillo tenía razón.
—Creo que es bueno que las mujeres que se vean en una incertidumbre sepan, simplemente sepan, lo que llevan dentro. Porque yo tenía que ver una ecografía todos los días a partir de esas semanas 20-21…, la verdad es que creo que es bueno.
Al margen de lo extraño que resulta pedir que se hagan unas ecografías que nuestra sanidad ya hace, la tertuliana Gemma Robles puso el dedo en la llaga.
El problema que tienen los políticos acostumbrados a culpar al mensajero cuando algo les sale mal, es que ahora los medios escritos también tenemos la posibilidad de poner la prueba audiovisual: ahí está lo que ha dicho.

Llamar las cosas por su nombre y dejar que la verdad sea la verdad no debería ser tan difícil. Jordi Hurtado lo logra en el mensaje que grabó tras la muerte del gran y magnífico José Pinto.
—Eso es, para todos los que hacemos este programa, yo qué sé, es… la palabra clara es una gran putada. José, nos has hecho una inmensa putada a todos, porque te queremos, te queremos muchísimo.
Todos, José, es la verdad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Siempre que sacamos el tema de las hemerotecas hay un detalle del que no hablamos y es de que a veces se da la desfachatez no solamente de decir que no hemos dicho lo que hemos dicho aún cuando hay imágenes que demuestran que lo hemos dicho. También se da la desfachatez decir que alguien ha dicho lo que no ha dicho cuando es evidente que no lo ha dicho.

Se dice que Pablo Casado dijo:

—Creo que es bueno que las mujeres que se vean en una incertidumbre sepan, simplemente sepan, lo que llevan dentro. Porque yo tenía que ver una ecografía todos los días a partir de esas semanas 20-21…, la verdad es que creo que es bueno.

Y se dice que Carlos Franganillo preguntó:

—Usted decía recientemente al digital ‘El Español’ que algunas mujeres en momentos de incertidumbre podían no saber qué tenían dentro. ¿Piensa que algunas mujeres en esos casos no lo saben y que el Estado tiene que intervenir de alguna manera?

Si lo que recoge Antonio Rico en la columna de hoy es cierto resulta evidente que Pablo Casado no dijo que lo que dicen que dijo. Ignoro si Pablo Casado lo dijo, pero es evidente que del primer extracto no se puede extraer el segundo de una manera evidente, como si no hubiera más posibilidades. Precisamente con el tema de las hemerotecas es doloroso que los periodistas en vez de enfrentar a los entrevistados con lo que realmente han dicho y pedir aclaraciones 'traduzcan' lo que dicen los entrevistados como si los espectadores-lectores fuéramos tontos.

Si no me equivoco en España hay al menos tres 'ecografías' obligatorias, pero no te obligan a verlas. De hecho hay gente que se niega a verlas por la razón que sea.

Además la pregunta de si algunas mujeres no se preocupan de las imágenes de las ecografías y no son muy conscientes de las características y circunstancias del feto que llevan dentro es una pregunta que o bien no podemos responder o bien sólo puede darse una respuesta afirmativa. Porque para decir que es falso hay que conocer el caso particular de todas las mujeres- me atrevo a decir que nadie está en esa situación en España- mientras que para decir que es verdadero basta con conocer a una sola. Una persona que ha hablado con 500 mujeres con un conocimiento perfecto no puede afirmar con verdad que todas lo tengan, pero a uno que ha hablado con una sola con un conocimiento imperfecto sí puede afirmar que no todas lo tienen.

No pretendo defender a Casado, ni mucho menos. Pero si no respetamos unas reglas básicas en el debate mal nos irá. Sobre todo en el metadebate sobre las reglas del debate.

Saludos.