20/12/12

MIL INTERMEDIOS MÁS


No sé cuándo, pero estoy seguro de que en algún momento de los últimos años “El intermedio” tuvo que afrontar una decisión que marcaría su futuro para siempre. El programa de laSexta -perteneciente a un género sumamente volátil con una altísima tasa de mortalidad infantil, nacido como una tentativa trivial para que un humorista en horas bajas rellenara el ratito previo al prime time- estaba empezando a tener un moderado éxito. No hablamos de shares superiores al 25 % ni de audiencias multimillonarias como consiguen otras cadenas, sino de muchos cientos de miles de espectadores fieles y un lento pero constante crecimiento en una nueva cadena a la que le costaba mucho alcanzar los dos dígitos en niveles de audiencia. 

Entonces, necesariamente, llegó el día en el que los responsables de “El intermedio” tuvieron que elegir entre suavizar el perfil del programa para ampliar el rango de público o mantenerse aún más definido en sus posturas políticas para asegurarse la continuidad de sus espectadores aun a costa de autoimponerse un duro techo. ¿Ha de acercarse la Academia a la gente rebajando sus contenidos o ha de mantenerse firme en ellos ofreciendo toda su calidad a aquéllos que se acercan a ella? ¿Debemos optar por la homeopatía y diluir el principio activo entre toneladas de agua hasta que no quede casi ni rastro de él, o es preferible mantenerse en la práctica de la medicina occidental y concentrar el fármaco para aumentar toda su potencia?

Y seguramente, -digo “seguramente” por enfatizar el texto, en realidad no tengo ni idea de lo que hablo-, Wyoming hizo valer su condición de médico, pegó un puñetazo encima de la mesa y convenció a la redacción de que el camino correcto era el más estrecho y el más arriesgado. Años más tarde -concretamente esta semana- “El intermedio” celebró su programa 1000, alcanzando un nuevo récord de audiencia y convertido desde hace tiempo en el programa estrella de laSexta. A veces -pocas, pero algunas veces pasa- los de izquierdas tomamos decisiones acertadas.

No hay comentarios: