7/4/17

ASÍ VOLABA, ASÍ, ASÍ


Buenafuente es un valiente. En plena tormenta por la condena contra los chistes sobre Carrero Blanco, va el tío y lleva como invitado a “Late Motiv” a un personaje llamado Carrero Negro (casualmente de piel negra) que se pasó todo el rato vestido de almirante haciendo bromas sobre volar, el cielo, las nubes, el coche, y los programas “¡Boom!” y “¡Ahora caigo!”. ¡Y muerto de risa! Ehh, retiro lo de “muerto”. Mejor decir que se moría de… o sea, que se reía mucho.  El caso es que Buenafuente es un valiente, tanto como el tipo que colgó esta noticia en el portal Menéame con la etiqueta “humor de altura”. Pero yo no.

Yo no quiero problemas con la justicia, así que me retracto públicamente de todas las veces que de niño canté “Los días de la semana” de Los Payasos de la Tele con Carrero Blanco de protagonista. En principio, aquella era solo una inofensiva cancioncilla infantil asquerosamente machista en la que una niña no podía ir a jugar porque cada día de la semana tenía que hacer una cosa: planchar, coser, barrer… Cosas de mujeres. Pero cuando Carrero sustituía a la niña, la canción pasaba a ser feminista hasta que llegaba el jueves, momento en que pasaba a ser apología del terrorismo: “Jueves antes de almorzar, Carrero Blanco fue a rezar, pero no pudo rezar porque tenía que volar. Así volaba, así, así…”. Cómo me arrepiento de aquello. La mala influencia de Fofó es la causa de que todos los niños de España hiciéramos apología del terrorismo a voz en grito.

Arrepiéntanse en “Cuéntame” si incluyeron alguna broma en el capítulo del atentado a Carrero. Arrepiéntanse en “laSexta noche” por permitir que Darío Adanti leyera un ofensivo chiste sobre Carrero de hace cuarenta años en vez de uno inofensivamente machista sobre gitanos mariquitas gangosos tartamudos. Y que los niños de hoy canten letras menos peligrosas: “Jueves antes de almorzar, un gangoso fue a jugar, pero no pudo jugar, porque tenía que asir. Así asía, así, así; así asía, así, así; así asía, así, así; así asía que yo lo vi”.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

los niños de "las colonias" del pais vasco cantaban: "Voló, voló Carrero voló y hasta el alero llegó", cuando yo era monitor. Cuanto arrepentimiento deberíamos hacer un acto de contrición y flagelarnos todos los días.

Sòcrates dijo...

Sabes si los flagelos en la semana del orgullo C.C.A.R. tienen indulgencias extra?
-Alomojó yo también me lo pienso-.