7/9/09

BRAGAS Y SENSIBILIDAD



"Evax Adapt, el protegeslip que se adapta a como te sientes hoy". Fascinante, ¿cómo puede un protegeslip adaptarse a las sensaciones de una mujer? Yo no soy experto en protegeslips, desde luego, y la industria no me ofrece protegegallumbos con los que establecer analogías. Si la chica está nerviosa por un examen futuro, ¿qué forma adopta Evax Adapt? ¿Y si está triste porque vio un gatito abandonado? Imaginemos que nuestra protagonista camina melancólica envuelta en recuerdos de un antiguo amor cuando de pronto se cruza con un sonriente malabarista morenito de pelo largo y biceps precisos que la devuelve al mundo de los vivos, ¿qué ocurre entonces con el dichoso paralelogramo de celulosa? ¿se metamorfosea angustiado en la entrepierna para cambiar de protegeslip melancólico a un más aliviado protegeslip eufórico? ¿De verdad Evax está tecnológicamente tan avanzada? ¿Sí? Entonces, ¿qué puñetas hacen fabricando compresas?

No me quedó más remedio que acercarme al supermercado para hacerme con un paquete de Evax Adapt. Los que no me conocen creerán que esto sólo es una historia chistosa para resolver la segunda mitad de la columna. Los que me conocen saben que lo hice de verdad. El destino es cruel, y cruzó en mi camino a una infortunada dependienta justo cuando retiraba la cajita del anaquel correspondiente. "Perdone, señorita, ¿son éstos los salvaslips que se adaptan a como te sientes hoy? Y si es así, ¿cómo lo hacen? ¿batería de litio, hay que recargarlos por la noche?". Palideció. Enrojeció. Palideció. Enrojeció. Recordó las estrictas instrucciones que le dieron sobre el trato a los clientes. "No... es que... según sean las brag... la ropa interior... pues entonces... si es más estrecha o... por ejemplo, si es un tang... o de otro tipo", y dio por concluida su explicación. Pero para mí fue suficiente: el protegeslip no se adapta a como te sientes hoy, ¡a lo que se adapta Evax Adapt es a las bragas que te pones!, y la identificación que hace el anuncio entre las bragas y las sensaciones femeninas es la nueva aportación de los creativos publicitarios al pensamiento contemporáneo. Tiempos difíciles.

7 comentarios:

Edu Galán dijo...

Por Dios, tiene que correlacionar el tipo de braga con cómo se siente la mujer ese día...

SI NO, SE PRODUCIRÍA UNA PARADOJA ESPACIOTEMPORAL Y... ¡¡¡ESTARÍAMOS PERDIDOS!!!...

Mujer 31 dijo...

Buenísimo!!

Erosè dijo...

Si cada salvaslip utilizara una batería de litio se agotaría por completo, sin posibilidad de de recarga, al final de su vida útil...

xD

-Erosè- (consumidora de salvaslips paleolíticos)

Elena dijo...

Me hubiese gustado cruzarme contigo en el supermercado y por cierto, qué cruel lo de la dependienta. Pobrecita.

Por otra parte no me gusta lo de comparar los sentimientos a unas bragas. Pero a mí no me gustan las tacticas publicitarias de las compañías de compresas (ni tampones, ni toallitas para bebés y sus culitos suavecitos y pequeñitititititos). ¡Qué bonito es sentirse mujer cuando va acompañado de fiebre, náuseas, un dolor insoportable y tus sentimientos en las bragas! (Vale venga, diré braguitas que queda mejor)

Eva Torices dijo...

Pero a ver, que yo me entere, que algo no me cuadra. Antonio, cariño, ¿desde cuándo es una novedosa aportación al pensamiento contemporáneo que la ropa se ajuste a como nos sentimos hoy? ¿No es la ropa una forma de comunicación desde que existe la ropa? "Sí, sí" -dirás- "listilla, la ropa ha sido, casi desde que existe, una forma de comunicar ¡el estatus! no los sentimientos, la ropa comunica QUIÉN eres, no cómo te sientes. Hay ropa de rey, de plebeyo, de puta, de jefe de la tribu y de animal peligroso. Pero no hay ropa de feliz, de desgraciado, de salido o de iracundo". Y yo me quedaré un momento callada mirándote con ojos entrecerrados mientras me acabo mi Aquarius y justo cuando comiences a creer que reconozco que tienes razón, te preguntaré: "¿y qué diferencia hay entre lo que somos y lo que hacemos, si sentir es hacer?".

Pero dilemas conceptuales aparte, en los que sabes que me encanta entredarme, todo el mundo sabe que las mujeres no son más que su útero, no veo por qué no vamos a definir la identidad de cualquier mujer, ya que todas son iguales, en función de lo que entra y sale de su útero, a saber: menstruación, flujo vaginal, penes, bebés... Resulta que las mujeres son fáciles cuando lo que sale es flujo vaginal y mucho, estrechas cuando sale poco o ninguno; sucias, impuras o alteradas e inestables (según religión o creencias al gusto) cuando lo que sale es menstruación; putas cuando lo que entra son muchos penes diferentes, amargadas o mogigatas cuando no entra ningún pene; madres ante todo cuando salen bebés, menos mujeres cuando no sale nunca un bebé... en fin, que no es algo que me invente yo, ni los publicistas contemporáneos. Desde que el mundo es mundo, exceptuando el matriarcado del Neolítico, las mujeres han sido cosas pegadas a una vagina, y todavía hoy lo siguen siendo por muy de modernos que vayamos, la prueba es que hay "chicas tampax" y "tanga girls", que a nadie le escandaliza que una mujer pegue a un hombre en la tele, que la "mujer" sigue siendo un tema en el debate público y una sección en las revistas y en las webs, y que hay misóginos pero no misántropas porque los misóginos odian a las mujeres pero las misántropas simplemente odian a toda la humanidad porque el hombre como macho no es susceptible de ser odiado específicamente, hombrefaltaríamás.

Eva Torices dijo...

La columna es brillante, eso sí, como siempre. Un final digno de un capítulo de House :) Yo también detesto esta publicidad.

Trepamuros dijo...

Muy bueno, con comprobación en persona y todo. En el mundo masculino hay cosas parecidas como los apurados perfectos de Gillete, que se adapta a cualquier tipo de cara... sólo le falta hacerte una depilación láser cada vez que te afeites y al final no te crezca más la barba. Por publicidades "absurdas" que no sea.