28/6/12

SÍNDROME DE LA SEGUNDA TEMPORADA


“Juego de tronos”, con sus ciento noventa y siete personajes, sus treinta y nueve localizaciones, con su minuciosísima, solidísima y lentísima narración, es una serie pensada para durar entre cincuenta y sesenta temporadas. Muchos jóvenes están empezando a verla en su primera adolescencia, y es previsible que la glosa de lo acaecido en Desembarco del Rey, en Invernalia, en el sitio ése por donde anda la de los dragones, en el Muro, en el Más Allá del Muro y en el Más Allá del Más Allá del Muro, les acompañe durante el resto de su vida. Pero “Homeland”... “Homeland”, la mejor serie de trama única de los últimos años, cinco personajes, una localización, un argumento frenético y tenso que desde el primer capítulo te arroja a un precipicio cuyo fondo está a la vista... carajo, es obvio que “Homeland” estaba pensado para durar una sola temporada y cerrar herméticamente la historia de Carrie Mathison y Nicholas Brody en el capítulo que FOX emitió esta semana y que todos seguimos mordiéndonos las uñas de los pies.

Pero no. El mundo de las tramas de las series de televisión también está gobernado por los mercados. Se denomina “síndrome de la segunda temporada” al alargamiento artificial que sufren series de trama única pensadas para una única temporada cuando su éxito de audiencia obliga a reescribir los momentos finales del último capítulo para que el argumento quede abierto y se puedan seguir rodando indefinidas nuevas temporadas con un marcadísimo descenso en su nivel de calidad. Le ocurrió a “Prision break”, cuya T1 fue memorable y cuyas temporadas posteriores daban risa. Le ocurrió a “Damages”, que aunque sigue aguantando dignamente el síndrome de la segunda temporada nunca se ha acercado ni de lejos a la perfección del guión de su T1. Y le va a ocurrir a “Homeland”. Tendremos que esperar al otoño para confirmarlo, pero el nuevo precipio que se abre cuando creíamos llegar al fondo del primero tiene pinta de acabar llegando a Desembarco del Rey. Y, leches, Joffrey Baratheon es mucho menos interesante que Abu Nazir.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Parafraseando a los Lannister, "un crítico de televisión siempre paga sus deudas"

Francesc Bon dijo...

Yo estuve allí :

http://francescbon.blogspot.com.es/2012/01/homeland.html