7/3/16

INDA GOT TALENT

Después de cada intervención de Eduardo Inda en “La Sexta Noche” zapeo a Telecinco para escuchar cómo la valora el jurado de “Got talent”. Hace dos semanas descubrí de casualidad que ambos programas están coordinados. Se hablaba sobre las posibilidades que tenía Donald Trump de alcanzar la presidencia de los EE.UU., e Inda señaló que uno de los teléfonos móviles de Pablo Iglesias está a nombre de una empresa iraní. Tras su intervención apreté sin querer un botón del mando a distancia que me condujo a Telecinco y escuché a Jesús Vázquez decir “he de reconocer que me has impresionado”, a lo que Edurne añadió “estoy alucinada, algo así requiere mucho ensayo. Yo te doy un ‘sí’”. Pensé que se trataba de una coincidencia, pero no pude evitar volver a zapear sobre Telecinco cuando, una hora más tarde y esta vez con motivo de un momento de “La Sexta Noche” en donde se debatía la implicación de la infanta Cristina en el caso Noos, Eduardo Inda señaló que uno de los teléfonos móviles de Pablo Iglesias está a nombre de una empresa iraní. “Creo que tienes unas increíbles capacidades para el show televisivo” decía justo en ese momento Jorge Javier mientras Eva Hache asentía.

Demasiada coincidencia. Sistemáticamente empecé a seguir ambos programas, y descubrí la coordinación temporal que hay entre ellos y cómo en realidad el jurado de “Got talent” se está refiriendo a las intervenciones que simultáneamente está realizando Inda en La Sexta y no a las actuaciones que se perpetran sobre el escenario de Telecinco. De pronto cobró todo el sentido del mundo que Inda compartiera programa con funambulistas, bailarines de una sola pierna y grupos de street workout más que con periodistas y políticos de diferentes partidos. Anteayer mismo, cuando Inda recibió cuatro ‘síes’ tras señalar, al pedírsele un comentario sobre la fallida investidura de Pedro Sánchez, que uno de los teléfonos móviles de Pablo Iglesias está a nombre de una empresa iraní, comprendí el verdadero significado de ese pacto transversal del que ahora tanto se habla.

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