 Por favor, dejemos a “House” morir en paz. No nos ensañemos terapéuticamente con él. La serie se ha terminado; de hecho, entró en estado vegetativo hace un par de temporadas. Es cierto que incluso en estos instantes de agonía final ha dado lugar a momentos brillantes que hacían pensar en la curación del enfermo. Pero no. Lo vimos esta semana con el último capítulo de la séptima temporada que emitió Cuatro, y cuyos minutos finales pasarán a la historia de la ignominia televisiva por su falta de respeto a la gloria de una gran serie. Qué vergüenza. Qué ridículo. Qué mamarrachada sin pies ni cabeza traída por los pelos para conseguir que el paciente logre sobrevivir un minuto más. “House” no es más que un vegetal intubado, conectado a respiradores y marcapasos, atiborrado de drogas. Wilson no puede seguir disimulando lo abochornado que se siente en cada escena. Cuddy se va. Y Gregory House sufre contracturas musculares debido a ser una permanente mueca de una parodia de una caricatura del personaje que una vez fue.
Por favor, dejemos a “House” morir en paz. No nos ensañemos terapéuticamente con él. La serie se ha terminado; de hecho, entró en estado vegetativo hace un par de temporadas. Es cierto que incluso en estos instantes de agonía final ha dado lugar a momentos brillantes que hacían pensar en la curación del enfermo. Pero no. Lo vimos esta semana con el último capítulo de la séptima temporada que emitió Cuatro, y cuyos minutos finales pasarán a la historia de la ignominia televisiva por su falta de respeto a la gloria de una gran serie. Qué vergüenza. Qué ridículo. Qué mamarrachada sin pies ni cabeza traída por los pelos para conseguir que el paciente logre sobrevivir un minuto más. “House” no es más que un vegetal intubado, conectado a respiradores y marcapasos, atiborrado de drogas. Wilson no puede seguir disimulando lo abochornado que se siente en cada escena. Cuddy se va. Y Gregory House sufre contracturas musculares debido a ser una permanente mueca de una parodia de una caricatura del personaje que una vez fue.Nos dio pena el final de “The wire”. Nos dio vergüenza el final de “Prison break”. Fue peor lo segundo que lo primero. Desconecten a “House” de todos los aparatos y dejénle morir tranquilo. Es lo que él hizo siempre con sus pacientes.
 
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario