23/4/08

¡POR SAN JORGE!

Como todos los años por san Jorge, seguimos empeñados en emparejar la televisión con los libros. Esta vez lo haremos señalando algo en lo que no habíamos reparado por ser demasiado habitual a nuestro alrededor (¿no está dicho que los peces serán los últimos en descubrir la existencia del agua?): cada vez hay más gente que lee un libro determinado porque vio en la tele un programa, reportaje o película que le animó a ello.

Ahí van unos cuantos ejemplos de jóvenes estudiantes que, más allá de lo que les mandan en clase, leyeron con ganas (¡qué escándalo!) lo siguiente: Víctor Suárez, vio la película “Robinson Crusoe” y después leyó con gusto la novela original de Daniel Defoe. Paula Errasti descubrió a Luis Piedrahita en el programa de magia “Nada x aquí” de Cuatro, después se lo pasó bomba leyendo “Dios hizo el mundo en siete días… y se nota” y “¿Un cacahuete flotando en una piscina sigue siendo un fruto seco?”. Tras ver la primera película de la saga, Marta Cadenas se está zampando con deleite la trilogía de “El señor de los anillos” de Tolkien, pero antes leyó “La historia interminable” de Michael Ende, y como su amiga Olaya Rodríguez leyó “Matilda” de Roald Dahl… gracias a las correspondientes películas. Sofía Álvarez quedó encantada tras ver “Mujercitas” y más aún tras leer “Mujercitas” y “Aquellas mujercitas” de Louise May Alcott. Raquel Berridi vio la miniserie “Orgullo y prejuicio” en Cosmopolitan TV y luego leyó el clásico de Jane Austen. Su amiga Laura Alonso también, pero le añadió “La memoria de una geisha” de Arthur Golden y “La guía para la vida de Bart Simpson”. Isabel Aramburu también leyó este libro.Y las dos primeras guías de la serie. Y varios libros de “Manolito Gafotas” tras verlo en la tele. Y “Spirit”. Y tebeos de Iznogud. Y, como su amiga Elena Argüelles, de Astérix y Tintín. Y Elena leyó además “Las crónicas de Narnia”. Y…

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y Héctor Martínez se leyó Canción de Hielo y Fuego pero sin necesidad de haberlo visto por la televisión