6/7/12

HA NACIDO UN MITO

Anteayer, durante la emisión en La 2 de la Entrega de los Galardones de la Academia de Televisión, nació el mito de Fran Llorente. Como todo el mundo sabe, para el surgimiento de un nuevo mito que quede enraizado en el imaginario cultural hacen falta tres circunstancias: en primer lugar, una persona que haya desempeñado un trabajo de relevancia social con un nivel de calidad extraordinario, o, al menos, extraordinariamente mejor a como había sido desempeñado por sus predecesores; en segundo lugar, una muerte, defenestración o cese de sus actividades clamorosamente injusta, inesperada o dramática; y, en tercer lugar, una ceremonia de gran resonancia pública en donde el desaparecido retorna ya en cuerpo místico y es objeto de reconocimiento y alabanzas por parte de todos los que quedaron tras su paso.

Hasta el miércoles, Fran Llorente cumplía los dos primeros requisitos. Hace falta ser un auténtico caradura para no aceptar que bajo su dirección los informativos de TVE alcanzaron los mayores niveles de calidad y honradez, -sí, honradez, ¿qué pasa?-, de toda la historia del medio. Hace falta estar cegado por el resentimiento o el interés para no entender que su injustificable sustitución por un periodista como Julio Somoano es un sucio zarpazo contra el medio que todos los españoles pagamos para mantenernos informados. Y hace dos días se cumplió el tercer requisito cuando la Ceremonia de Entrega de los Premios Iris 2012, -que conceden los miembros de la Academia de Televisión-, se convirtió en un sincero, -y valiente, sabiendo cómo se las gastan los Lannister-, homenaje colectivo a Llorente como nunca antes habíamos visto en el gremio.

Somoano no se va a medir contra Urdaci, Ferrari, Buruaga o Iglesias, sino que sale a actuar justo después de alguien que unánimemente ha sido aclamado como referente del buen hacer periodístico. Esto supondría una gran presión para un profesional normal. ¿Le importará algo más que el orín de los perros a alguien que viene de dirigir un informativo en Telemadrid? Permanezcan atentos a sus pantallas.

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